Gabriel Soto reveló que pospuso nuevamente la celebración de su matrimonio por una poderosa razón.
El amor entre Gabriel Soto e Irina Baeva no está en duda. Los actores han logrado vencer toda adversidad que se ha presentado en su polémica relación y continúan juntos planeando su futuro. Sin embargo y a pesar de su fuerte unión de pareja, no han logrado llegar al altar como lo han planeado.
Aunque se encuentran muy ilusionados de poder unir sus vidas en matrimonio, la pareja nuevamente se ve en la difícil necesidad de tener que aplazar la fecha de su boda. Si primero fue la pandemia, ahora hay otra razón igual de poderosa y completamente fuera de su control. El actor dio a conocer que el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania ha sido el gran factor que se interpone en que él e Irina se conviertan en marido y mujer.
“En la vida real estoy feliz, estoy enamoradísimo, estoy contentísimo, estamos ilusionadísimos con la boda y seguimos en los preparativos y lo único que nos ha detenido un poco es, desgraciadamente, todo el tema que está pasando en Rusia y Ucrania”, reveló al matutino Despierta América (Univision).
Debido a la guerra y al tenso ambiente político que enfrentan esos países, la familia de la actriz de origen ruso no ha podido viajar a México para la celebración, por lo que la pareja se niega a celebrar la boda sin la presencia de los seres queridos de la novia.
“La familia de Irina está un poquita temerosa de salir de Rusia ahorita y no han podido, pues, concretar el hecho de que vengan y obviamente no vamos a hacer boda si no está su familia”, dijo Soto.
No obstante, aseguró que deberá ser este año, ya que se encuentran ansiosos por llevar a cabo la ceremonia, que inicialmente tuvo que ser aplazada debido a los protocolos sanitarios implementados en su país a causa de la pandemia.
“De este año no pasa pues ya nos esperamos. Vino la pandemia y luego ahora esto. Son cosas que están fuera de nuestras manos, pero bueno, finalmente si queremos esperar un poco a que se aligere un poquito el conflicto y puedan ellos ya viajar con tranquilidad”, explicó.
Una vez convertidos en marido y mujer, el actor espera poder pronto agrandar la familia con Irina y convertirse en padre por tercera vez – tiene dos hijas fruto de su relación con la actriz Geraldine Bazán.
“Irina es su sueño que ella tiene y yo pues obviamente feliz de formar una familia en ese sentido”, expresó. “Es el proceso, evidentemente, si ya te casas, pues ¿qué es lo que viene? Un hijo, una familia, así que estamos echándole ganas”.
Anteriormente, Gabriel había revelado detalles que deseaban una boda frente al mar, probablemente en Acapulco, por lo que, por cuestiones de clima, debía ser entre agosto y septiembre. Por el momento, se desconoce si ya hay nueva fecha. Lo que sí ha confirmado la pareja es que la novia usará dos vestidos que ya fueron confeccionados, y que las hijas del actor, Elisa y Miranda, no faltarán a la celebración.
“Obviamente van a estar conmigo ahí, son mis hijas. Estamos con el wedding planner también viendo a ver qué va a pasar, como van a estar y de qué manera van a participar”, expresó a la prensa mexicana a principios de mayo. “Ellas están muy emocionadas, así que ya veremos de qué manera van a participar, pero evidentemente de una manera muy íntima porque son mis hijas”.
Fuente: People en Español