Los años 1990 son, sin duda alguna, uno de los períodos más recordados por los fanáticos de la lucha libre profesional. En esa década surgieron estrellas como la Roca, ‘Stone Cold’ Steve Austin, Goldberg o Sting y se crearon agrupaciones como NWO y D-Generation X, convirtiéndose en una de las etapas clave en la historia de este ‘entretenimiento deportivo’. Y en gran parte fue por la competencia: luego de una meteórica alza de popularidad, la WWE por primera vez se topó con un adversario digno: la WCW.
La empresa liderada por Eric Bischoff no solo consiguió destronar a la WWE (aunque por un período de tiempo relativamente corto) en la guerra de los ‘ratings’, sino también estableció un precedente que toda empresa de lucha libre busca repetir. Y ahora ha llegado el turno de la All Elite Wrestling (AEW): la nueva compañía, creada en el 2019, ya cuenta con varias estrellas de la escena independiente de la lucha libre y se ha convertido en el lugar más atractivo para los luchadores que acaban de salir de la WWE.
¿Cómo fue creada la AEW y quién es su fundador?
El nuevo negocio que ha emprendido un pulso contra la WWE por la audiencia y la notoriedad, la AEW, fue fundada por el empresario Tony Khan con una importante inversión de su padre, Shahid Khan –inmigrante pakistaní, que se convirtió en multimillonario y propietario del equipo de fútbol americano Jacksonville Jaguars– la cual, según los informes, ascendía a 100 millones de dólares.
Para poner en marcha su proyecto, Khan, que en su juventud era gran fan de la WWE, decidió en 2018 contratar a varias exestrellas de la compañía de Vince McMahon, como Chris Jericho y Cody Rhodes. Todo lo que necesitaba era decenas de millones de dólares. Mientras, su padre, que tiene una fortuna estimada en 8.000 millones, aceptó la idea de mala gana. “No creía en absoluto que fuera una buena idea”, afirmó Shahid Khan el pasado junio en una entrevista a Forbes. “Pero le dije a Tony: ‘Mira, cuando me muera y me vaya, les voy a dejar a ti y a tu hermana mucho dinero. ¿Por qué no gastas algo de eso mientras estoy vivo?’“, agregó.
Con suficientes talentos de renombre, incluyendo al legendario excomentarista de la WWE Jim Ross, la AEW fue lanzada con el evento inaugural Double or Nothing: con todas las entradas agotadas; el ‘show’ tuvo lugar en mayo del 2019 en Las Vegas. Luego, el programa semanal ‘AEW Dynamite’ comenzó a transmitirse el 2 de octubre de 2019 en el canal TNT, y rápidamente se hizo popular.
Además, igual a la WWE, la All Elite Wrestling no se limita a los eventos televisados: su contenido multiplataforma incluye dos series semanales de YouTube —’AEW Dark’ y ‘Being the Elite’— y la serie semanal de pódcast ‘AEW Unrestricted’. Además, la AEW anunció un nuevo ‘show’, ‘Rampage’, que se estrenará el próximo 13 de agosto y se emitirá todos los viernes a las 22:00 (hora del Este de EE.UU.) en TNT, después de que termine ‘Smackdown’ de la WWE en Fox.
Actualmente, la empresa fundada por Tony Khan ya cuenta con las leyendas de lucha libre como Chris Jericho y Sting, o Jon Moxley, excampeón de la WWE (donde era conocido como Dean Ambrose). Asimismo, en su plantilla están Cody Rhodes y varios de los nombres principales de la escena independiente, como Kenny Omega o el dúo The Young Bucks, que, además de participar en los combates, también forman parte de la dirección de la compañía.
Según asegura la propia empresa en su página web, “por primera vez en muchos años, la AEW ofrece una alternativa a la lucha libre convencional, con un plantel de talentos de talla mundial que está inyectando un nuevo espíritu, frescura y energía a la industria”.
“No quiero ser la próxima compañía de lucha libre del pasado”, dijo Tony Khan sobre los antiguos ‘shows’ que no pudieron competir con la WWE. “Nos encanta la lucha libre del pasado, la del presente y la del futuro. Eso es lo que nos da una gran oportunidad de retener y ganar audiencia”, agregó.
La receta del éxito
Aunque la AEW mantiene el marco general establecido por la WWE y que los fanes de la lucha libre ya conocían, la nueva compañía se destaca por un enfoque diferente en muchas áreas.
En primer lugar, ofrece más libertades a las ideas de los luchadores para que ayuden a su éxito utilizando su propia creatividad. En cuanto a los guiones, la WWE tiene una rutina establecida que construye una historia, mientras que AEW ofrece mucha más flexibilidad. La directora de marca, Brandi Rhodes, explicó que la empresa no tiene una sala de guionistas, como su rival, y afirmó que sus monólogos o ‘promos’ en el ring son sin guion, un enfoque que tiene buena respuesta entre los nuevos fanes. “No está escrito como si fuera una telenovela”, dijo. “Tony contrató a algunos de los mejores luchadores del mundo y no cambia quiénes son”, agregó.
“En la WWE se lo dan todo con los guionistas que tienen y, no sé, si tuviera que leer lo que escriben esos tipos y no me saliera del alma, no creo que hubiera conseguido nada. Ellos tenían una visión y yo otra completamente distinta”, admitió el famoso exluchador Diamond Dallas Page en una entrevista del año pasado a Wrestling Inc. Por su parte, la estrella de la WWE Jeff Hardy apuntó a ESPN West Palm que en la AEW “tienen una mentalidad más abierta”, mientras que su empresa “está un poco anclada en sus costumbres”.
Fuera de los guiones, una de las reglas más singulares que aporta la AEW en comparación con su rival es que las victorias y las derrotas importan: un luchador solo puede obtener una oportunidad por el título si su ratio de victorias y derrotas es mejor que el de los demás. Esto garantiza que se valore el trabajo duro de los deportistas y también permite el ascenso de un luchador al evento principal desde el nivel inferior.
Además, difieren los términos de contratos de los luchadores. Mientras que los de la WWE tienen contratos exclusivos que les impiden trabajar para otras promociones, los de la AEW gozan de un relativo grado de libertad y algunos de ellos pueden aparecer en los espectáculos televisados de otras empresas, tanto en EE.UU. como en el extranjero. Así, Chris Jericho y Jon Moxley pueden aparecer en los programas de la compañía japonesa New Japan Pro-Wrestling (NJPW), cuando el horario de los combates en la AEW se lo permite.
“No se puede poner una silla de montar en un mustang”, afirmó Cody Rhodes, quien también es vicepresidente ejecutivo de la AEW. “La gente necesita esto. Quieren experimentar otros mundos, y ningún contrato en AEW es un contrato general. Todo el mundo puede ir desde diferentes lugares y apuntarse. Las puertas están abiertas”, agregó.
Asimismo, la AEW está colaborando con otras empresas de lucha libre, por ejemplo, Impact Wrestling y National Wrestling Alliance, lo que beneficia sobre todo a los aficionados, ya que abre la puerta a combates cruzados entre estrellas de ambas compañías. Mientras, una de las quejas de los fanes de la WWE son las constantes revanchas y el uso excesivo de los mismos luchadores.
Como respuesta a su rival, al parecer, la WWE mantuvo conversaciones con NJPW con miras a convertirse en el socio estadounidense exclusivo de la promoción nipona. Sin embargo, hasta el momento, el acuerdo no se concretó.
Sin embargo, la WWE está saliendo de la pandemia mucho más esbelta. La compañía despidió este año a más de veinte luchadores, algunos de los cuales fueron contratados por la AEW, como Malakai Black, Miro o Andrade ‘El Ídolo’ (conocidos en la WWE como Aleister Black, Rusev y Andrade, respectivamente).
La ola de despidos y recortes presupuestarios provocaron rumores de que el presidente de la WWE, Nick Khan, está preparando la empresa para su venta. El exescritor de la compañía Dave Schilling, que trabajó para su equipo creativo a principios de 2019, afirmó en su cuenta de Twitter que los despidos de superestrellas suelen suceder si una compañía está tratando de “maximizar las ganancias antes de una venta”.
No obstante, no es la primera vez que aparecen rumores sobre una posible venta de la WWE. De momento, esas especulaciones carecen de cualquier asidero de confirmación.
En cuanto a la All Elite Wrestling, ¿podrá la empresa conseguir tanto alcance como para competir directamente con ‘SmackDown’ y ‘Raw’? El pasado ya ha mostrado que no es buena idea hacer pronósticos. En cualquier caso, el futuro de esa ‘batalla’ entre las dos empresas lo determinarán sus próximos pasos y, por supuesto, el público.
Fuente RT