República Dominicana.-La infertilidad es un tema que afecta a muchas parejas en todo el mundo y es un problema que involucra tanto a hombres como a mujeres. A menudo, se tiende a enfocar la atención exclusivamente en la mujer cuando se habla de este padecimiento, pero es esencial reconocer que los factores de riesgo y las causas pueden estar igualmente relacionados tanto con el factor masculino como con el factor femenino.
Aunado a lo anterior, existen factores de riesgo a los que las parejas se enfrentan al querer lograr un embarazo como son: la nutrición, el peso, el ejercicio, el estrés físico y psicológico; las exposiciones ambientales y ocupacionales; el uso y el abuso de sustancias, fármacos, y medicamentos, así como en el caso de la mujer, la edad es un factor determinante para la infertilidad.[1]
Y es que la edad fértil de las mujeres se sitúa entre los 20 y los 40 años; sin embargo, a partir de los 30 años la fertilidad femenina empieza a disminuir y a los 35 se acelera dicha disminución, obteniendo alrededor del 60% de probabilidades para concebir.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la infertilidad es una enfermedad del sistema reproductivo definida como la incapacidad de lograr un embarazo clínico después de 12 meses o más de relaciones sexuales sin el uso de ningún método anticonceptivo.
Lamentablemente, las parejas que se enfrentan a un problema de infertilidad pueden sufrir también alteraciones psicológicas[2], como depresión, ansiedad, frustración, lo cual podría interferir con las actividades cotidianas, impactando en la sociedad.
En el marco del Mes Internacional del cuidado de la Fertilidad, la Dra. Konny Abreu, doctora con especialidad en Reproducción Asistida y Fundadora y directora de la Unidad de Investigación Reproductiva y sus Tratamientos, UNIRT, hace un llamado a crear conciencia sobre los hábitos en el estilo de vida que podrían afectar la fertilidad, tanto en mujeres como en hombres. La infertilidad es un problema de dos, los factores de riesgo están relacionados en un 40 % a factores femeninos, 40 % a factores masculinos, 10 %a ambos y 10 % a causas desconocidas.[3]
En el caso femenino, las mujeres nacen con un número determinado de óvulos que a medida que van pasando los años, estos van desapareciendo y perdiendo su calidad, por lo que cuando una mujer a sus 35 años decide iniciar una familia, puede enfrentarse a problemas para conseguirlo.
Otra de las principales causas de infertilidad en las mujeres es el Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP), una afección que se caracteriza por desequilibrios hormonales en el que las mujeres tienen niveles elevados de hormonas masculinas (andrógenos) que pueden afectar la ovulación, el ciclo menstrual regular, tener aumento en el número de pequeños quistes en los ovarios, problemas de la piel, como acné y aumento de vello, resistencia a la insulina, con un mayor riesgo a desarrollar diabetes, impactando la fertilidad.[4]
La doctora Veronica Hernández, directora Médica de Merck para Centroamérica y Caribe,mencionó que “dentro del 10 % asociado a la infertilidad a causa de factores relacionados al hombre y a la mujer, existe la infertilidad secundaria, que es la incapacidad de concebir aún después de un embarazo exitoso. Esta condición está relacionada con factoresfemeninos, como trastornos ovulatorios, enfermedades inflamatorias pélvicas, endometriosis, fibromas uterinos y con factores masculinos, como desequilibrios hormonales, niveles bajos de testosterona, infecciones en el tracto urinario o varicocele, que es la dilatación de las venas en el escroto. Afecciones que modifican la producción de espermatozoides y la calidad del semen.
Por lo anterior, el estudio del factor masculino,a través de la andrología, y de los factores femeninos en conjunto, es de vital importancia en la investigación sobre la causa de infertilidad en la pareja. El que la pareja acuda a un médico de manera conjunta nos ayudará a diagnosticar las alteraciones en los varones y en las mujeres con dificultades para lograr un embarazo exitoso.
A pesar de que la infertilidad es un desafío que afecta a muchas parejas en todo el mundo, hoy gracias a la tecnología existen diversas técnicas de reproducción asistida que pueden ser de utilidad para lograr el sueño de tener un bebé.
Entre estas posibilidades se encuentra, en el caso de las mujeres que desean postergar su maternidad, la criopreservación o congelación, una técnica de reproducción asistida que consiste en conservar óvulos en tanques de nitrógeno a -196 °C, la cual mantendrá al óvulo en condiciones de vida suspendida sin alterar su calidad por un tiempo indefinido.
“Además de destacar la importancia de acudir con el Médico en Reproducción asistida o Biólogo de la Reproducción, quienes ponen al alcance de las parejas técnicas como Fertilización In Vitro, Inseminación intrauterina, Inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), Ovodonación, Vitrificación, Diagnóstico preimplantatorio (DGP), entre otros, cuyos procedimientos brindan a las parejas la posibilidad de ser padres”, citó la doctora Abreu.
Por todo lo anterior es importante la normalización de los problemas de infertilidad y es que a través de nuestra labor e UNIRT,(Unidad de Investigación Reproductiva y sus Tratamientos), queremos aprovechar el marco del Mes Internacional del cuidado de la Fertilidad para que la población en República Dominicana, haga conciencia de su fertilidad y su cuidado y de manera regular acudan con un especialista y recibir la atención que merecen, y cuenten con los recursos de investigación, información y prevención sobre uno de los aspectos más importantes para el ser humano: la posibilidad de reproducirse así como poder traer a la mesa sin prejuicios y abiertamente temas de esterilidad y poder empatizar con aquellos que lo padecen.