Efectividad de la vacuna de Pfizer ¿A quién puede administrase?

Efectividad de la vacuna de Pfizer ¿A quién puede administrase?

Este viernes, el país recibió el segundo lote de vacunas de Pfizer y BioNTech con 208,260 dosis para incluir en el plan #VacúnateRD.

Hace una semana llegaron  228,150 dosis, que sumado con este son 436,410 vacunas. 

La administración de vacunas en República Dominicana, así como en otros países, depende de diversos factores, como número de dosis recibidas, disponibilidad, problemas de salud aparentemente asociados (pero muy infrecuentes) a determinados rangos de edad, etc.

Según el Grupo de Expertos de Asesoramiento sobre inmunización (SAGE) de la OMS, la vacuna de ARN mensajero contra la COVID-19 de Pfizer-BioNTech es segura y eficaz. Con todo, hay grupos de población para los que no se recomienda la vacunación, ya sea debido a contraindicaciones, falta de suministros o falta de datos.

Actualmente esos grupos los constituyen las personas con antecedentes de alergias graves, la mayoría de las mujeres embarazadas, viajeros internacionales que no forman parte de un grupo prioritario y menores de 16 años.

¿A quién puede administrase la vacuna contra la COVID-19 de Pfizer-BioNTech?

Personas con alergias

No deberá administrarse la vacuna a las personas con antecedentes de reacciones alérgicas graves a cualquiera de sus componentes.

Mujeres embarazadas y en período de lactancia

Las mujeres embarazadas tienen un mayor riesgo de sufrir una infección grave de COVID-19 y parece existir una relación entre la enfermedad y el riesgo de que se produzca un parto prematuro.

Puede ofrecerse la administración de la vacuna a las mujeres en periodo de lactancia si forman parte de un grupo al que se recomienda la vacunación (por ejemplo el de los trabajadores de la salud). La OMS no recomienda interrumpir la lactancia materna después de la vacunación.

Niños

La vacuna solo se ha probado en niños mayores de 16 años.

Así, en este momento la OMS no recomienda vacunar a niños menores de 16 años, incluso si pertenecen a un grupo de alto riesgo.

Personas con afecciones médicas conocidas

Se ha comprobado que la vacuna es segura y eficaz en personas con diversas afecciones asociadas a un mayor riesgo de enfermedad grave.

Entre ellas, la hipertensión, la diabetes, el asma, las enfermedad pulmonares, hepáticas o renales, así como las infecciones crónicas estables y controladas.

Se requieren más estudios para conocer los efectos de la vacuna en las personas inmunodeprimidas. La recomendación provisional es que las personas inmunodeprimidas que forman parte de un grupo para el que se recomienda la vacunación pueden ser vacunadas aunque, cuando sea posible, no antes de recibir información y asesoramiento al respecto.

Las personas que viven con el VIH tienen un mayor riesgo de sufrir una infección grave de COVID-19. Existen pocos datos de seguridad obtenidos en ensayos clínicos sobre personas infectadas por el VIH en las que la enfermedad está bien controlada. Deberá ofrecerse información y, cuando sea posible, asesoramiento sobre los datos disponibles a las personas infectadas por el VIH que vayan a recibir la vacuna.

Personas que tienen o han tenido la COVID-19

Puede ofrecerse la vacunación a las personas que ya han padecido la enfermedad en el pasado.

A pesar de ello, dada la limitación en las existencias de vacunas contra la COVID-19, puede que las personas prefieran aplazar su vacunación hasta seis meses desde el momento de la infección por SARS-CoV-2. A medida que se disponga de más datos sobre la duración de la inmunidad después de la infección podrá ajustarse ese período de tiempo.

No se recomienda realizar pruebas de una posible infección en el pasado para decidir sobre la conveniencia de la vacunación.

Viajeros

En la actualidad, la OMS no apoya la introducción de requisitos de prueba de vacunación contra la COVID-19 para los viajeros internacionales, como condición para salir de un país o entrar en él. Véase la orientación provisional de la OMS sobre viajes internacionales durante la pandemia.

Posología

12 días después de la primera dosis comienza a desarrollarse un efecto protector, pero la protección completa requiere dos dosis que la OMS recomienda administrar entre 21 y 28 días después. Es necesario seguir investigando para conocer la posible protección a largo plazo de una sola dosis.