Debido a la preocupación generada por la aparición de nuevas variantes de COVID-19, el Ministerio de Salud Pública está enviando muestras de casos con cuadro clínico grave al Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos, a los fines de determinar cuál es la variante que está provocando esos niveles de gravedad en personas que ya se han vacunado, inclusive.
De acuerdo con la doctora Natalia García Batista, asesora científica del Ministerio de Salud Pública, con la aparición de las nuevas variantes, la enfermedad se ha hecho más agresiva, provocando estados de gravedad y fibrosis pulmonar en la población joven, que era la más considerada por el virus.
Explicó que en el país ya existen las variantes Gamma P1, procedente de Brasil; así como la Alfa 117, de Reino Unido; y la Delta B617, de La India, la cual aún no se ha confirmado, pero que posiblemente esté circulando en el país.
Advirtió que la Delta B617 es entre un 40 y 60 por ciento más contagiosa que la Alfa 117, que es la que ocupa el segundo lugar en cuanto a su velocidad de propagación.
Sostuvo que éstas variantes se hacen más resistentes al tratamiento, y que no son cubiertas al 100% por las vacunas, por lo que se hace necesario la aplicación de una tercera dosis, y posiblemente la elaboración de más fármacos que puedan atacar estas variantes.
Sin embargo, dijo que se ha demostrado que la vacuna Pfizer neutraliza la peligrosa cepa Delta B617 en un 88% y a la Alfa 117 en un 93%.