Importaciones alimentos compiten con pago deuda pública.
SANTO DOMINGO. – El exsenador Adriano Sánchez Roa, expresó este domingo su preocupación por la acelerada disminución de terrenos con vocación agrícola y pecuaria, planteando la realización de estudios técnicos que delimiten la utilización de esos suelos en obras ajenas a la producción de alimentos.
Manifestó además que las autoridades deben tomar las medidas pertinentes para enfrentar la situación, porque ya las importaciones compiten en cantidades con el pago de la deuda externa.
En ese sentido, el también secretario de Asuntos Agropecuarios del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), y agrónomo, señaló que durante los últimos 50 años el país ha perdido 13 millones de tareas cultivables, desde 1971 a la fecha.
“Hace 50 años el país tenía 43 millones de tareas cultivables, de las cuales sólo hay 30 millones, porque se ha venido urbanizando mucho terreno, con el crecimiento horizontal de los pueblos”, aseguró Sánchez Roa al ser entrevistado en el programa “Así Vamos, con Héctor Guzmán”, que se difunde cada domingo a las 10:00 AM por TRA Teleradio América.
“Es urgente elaborar y aplicar políticas precisas que preserven los suelos agrícolas de calidad, al tiempo de facilitar el necesario aumento infraestructural del país mediante el crecimiento vertical y la ocupación de las áreas no aptas para la producción”, dijo Sánchez Roa.
Dijo haber comprobado la gravedad de la situación, cuando visitó a un amigo que reside en un campo de Moca observando que en el entorno de su vivienda se habían levantado decenas de casuchas en el suelo negro que caracteriza es zona.
Recordó que en el 2017 presentó y el Senado aprobó una resolución para contrarrestar el problema, mediante la realización de estudios técnicos que delimitaran la utilización de suelos agrícolas en obras ajenas a la producción de alimentos.
Manifestó que el Estado está en la obligación de corregir este problema, “sin esperar que apruebe la ley de Ordenamiento Territorial, porque si se pone a esperarla, nunca lo hará”.
Propuso que el gobierno procure dirigir su atención a las construcciones verticales, “porque tenemos que alimentar a los 11 millones de habitantes que somos ahora, más igual cantidad de los vecinos haitianos, así como los casi ocho millones de turistas que nos visitaban antes de la pandemia”.
Baja producción
Sánchez Roa, quien acaba de poner en circulación su más reciente libro titulado “La Nueva Agricultura”, plantea el retorno a las políticas agropecuarias que han sido exitosas, entre las que citó las aplicadas en los gobiernos de Joaquín Balaguer, Hipólito Mejía y Danilo Medina.
Dijo que el país se beneficiaría grandemente si esas experiencias se recogen y adaptan a lo que existe hoy, con las amplias investigaciones que existen en el mundo, la producción agrícola dejaría de ser deficiente como lo es actualmente.
Citó el caso del maíz, cuya producción “cuando nos va bien”, apenas llega a 2.5 quintales por tarea, mientras en México se cosechan 19, lo que atribuyó al abandono de las investigaciones agropecuarias y del campo.
Reforma Agraria
A manera de sugerencia, el profesional agrícola planteó dirigir la mirada hacia la Reforma Agraria, la que llegó a captar alrededor de 11 millones de tareas, pero ahora el IAD, cuenta en su plan operativo con algo más de cuatro millones, pero las que están bajo cultivo suman menos de tres millones.
También se manifestó partidario de reactivar los productos que sirvieron de soporte económico a la República Dominicana, como fueron el azúcar, café, tabaco y cacao, cuyo aporte al Producto Interno Bruto (PIB) en 1977 era el 20.1% y ahora sólo es el 5%.
Planteó que ante la inminencia de eliminar el Consejo Estatal del Azúcar (CEA) y el Instituto Nacional del Azúcar (Inazúcar), “he propuesto que el gobierno busque productores de azúcar y agrónomos, para asentarlos en las áreas que les quedan al CEA, para producir azúcar de calidad”.
Falta de financiamiento
De otro lado, el alto dirigente opositor observó que los grandes países aplicaron gradualmente, a partir de 1985 hasta ahora, una política con miras convertirse en productores e industriales, por lo que dejaron de financiar a los países pobres.
Recordó que en los 14 años que ocupó la curul senatorial por la provincia Elías Piña, solo fueron aprobados dos financiamientos, para el sector agropecuario, ante la deficiencia económica del Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA), creado en 1972.
“Es por eso que planteo en mi libro que se debe retomar la política de respaldar la producción de alimentos, lo que sería un segmento importante para captar divisas y evitar que nos afecte en mayor profundidad”, precisó.