AFP.- Los senadores estadounidenses siguen examinando el sábado de madrugada una larga serie de enmiendas al plan de estímulo de 1,9 billones de dólares impulsado por Joe Biden, en una sesión maratónica destinada a aprobar este paquete económico durante el fin de semana.
Tras nueve horas de bloqueo, los demócratas y la Casa Blanca lograron convencer durante la noche del viernes al sábado a un senador moderado de votar una enmienda sobre las prestaciones por desempleo.
“Este acuerdo nos permite avanzar en este plan que necesitamos de manera tan urgente”, dijo la Casa Blanca, vía su portavoz, Jen Psaki.
El estudio del plan de estímulo, necesario para que la primera economía del mundo, muy afectada por la pandemia, se mantenga a flote, se prevé largo.
Tras salir del bloqueo que paralizó la sesión, los senadores iniciaron un procedimiento en el que se puede proponer decenas de enmiendas y exigir un voto sobre cada una. Un momento que la oposición republicana aprovecha para detallar sus quejas.
Los demócratas tienen una ligera mayoría en el Senado, donde controlan igual número de escaños que los republicanos (50), pero en caso de empate, la vicepresidenta Kamala Harris dispone de un voto decisivo. El líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, se mostró convencido de poder adoptar el plan “esta semana”.
El objetivo de los demócratas es adoptarlo antes del 14 de marzo, el día en que finalizará la extensión del pago de subsidios por desempleo decidida en el anterior plan de rescate.
El paquete de ayuda de Biden prevé, entre otros, cheques de 1.400 dólares para millones de estadounidenses y 350.000 millones de ayudas a los Estados y municipios.
También se destinarán miles de millones a luchar contra la pandemia, por ejemplo 49.000 millones para fomentar los diagnósticos e incentivar la investigación, y más de 14.000 millones para aumentar el ritmo de la vacunación.
Una vez aprobado, el plan volverá a la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, donde ya fue aprobado a finales de febrero, para una votación final, antes de ser promulgado por el presidente.
- “Absolutamente esencial” -El viernes, Biden insistió en que es necesario aprobarlo sin dilación, moderando el entusiasmo generado por los buenos resultados en las cifras de empleo.
Es un dispositivo “absolutamente esencial para revertir la situación, hacer que los niños vuelvan a la escuela en total seguridad, ofrecer un salvavidas a las pequeñas empresas y derrotar al covid-19”, dijo Biden.
En total se crearon 379.000 empleos en febrero y la tasa de desempleo se redujo ligeramente a 6,2%.
Pero “a este ritmo se necesitarán dos años” para volver al nivel previo a la pandemia, advirtió el presidente. En este momento 18 millones de estadounidenses cobran una prestación tras haber perdido su trabajo o gran parte de sus ingresos mensuales.
Las nuevas contrataciones del mes de febrero se registraron principalmente en los bares y restaurantes, duramente golpeados por las restricciones implementadas en la pandemia.
Otras actividades vinculadas a ocio y alojamiento, así como a servicios de salud, ventas minoristas e industria manufacturera también registraron nuevas contrataciones el mes pasado.
Estas cifras sugieren que lo peor de la crisis pasó y que los empresarios parecen enfocarse en el “mini boom” económico que se espera para la primavera boreal
La campaña de vacunación avanza y las ayudas públicas masivas -además de gastos en baja- pusieron dinero en las cuentas bancarias de los estadounidenses, por lo que se espera un incremento importante del consumo.
Según Biden, las cifras positivas del empleo son seguramente producto del plan de impulso de 900.000 millones de dólares aprobado a fines de diciembre y promulgado por su predecesor Donald Trump.
Pero sin nuevas ayudas “todo se ralentizará de nuevo”, dijo el presidente. “No se puede dar un paso adelante y dos pasos atrás”, agregó.
Su plan de 1,9 billones es el tercer paquete excepcional de ayuda aprobado por el Congreso desde el inicio de la pandemia.