AFP.- El jugador de basquetbol estadounidense Jeremy Lin, ganador de un anillo de la NBA, hizo un llamamiento a la unidad y la solidaridad para combatir el racismo tras denunciar esta semana haber recibido graves insultos en la pista.
El actual jugador del Santa Cruz Warriors de la G-League, liga filial de la NBA, publicó el jueves un mensaje en Facebook sobre los problemas de racismo y discriminación estructurales que afrontan estadounidenses de origen asiático, que se han agravado durante la pandemia de coronavirus.
“Ser un veterano de NBA durante 9 años no me protege de que me llamen ‘coronavirus’ en la cancha”, escribió Lin, de 32 años, como un ejemplo de esta situación.
La G-League abrió el viernes una investigación sobre el insulto, de acuerdo con el medio The Athletic, aunque Lin dijo que no identificará a su autor.
“Sé que esto decepcionará a algunos de vosotros, pero no voy a nombrar ni avergonzar a nadie”, escribió el base el sábado en Twitter.
“¿De qué sirve en esta situación destrozar a alguien? Esto no hace que mi comunidad sea más segura ni resuelve ninguno de nuestros problemas de racismo a largo plazo”, dijo el jugador del Santa Cruz Warriors, equipo asociado a los Golden State Warriors de la NBA.
Lin recordó cómo, durante su etapa como jugador y estudiante en la universidad de Harvard, su entonces entrenador Kenny Blakeney le relató las experiencias racistas que sufrió como afroestadounidense.
“Combatir la ignorancia con ignorancia no nos llevará a ningún sitio”, recalcó Lin. “Escuchen a las voces que nos enseñan cómo estar contra el racismo contra TODAS las personas. Creo que esta generación puede ser diferente pero necesitaremos solidaridad y empatía para llegar ahí”.
Lin, quien fue el primer jugador de la NBA nacido en Estados Unidos de ascendencia china o taiwanesa, comenzó su carrera con los Warriors en 2010.
Dos años después, el base tuvo un fulgurante ascenso al estrellato en su primera temporada con los New York Knicks, con actuaciones antológicas como los 38 puntos logrados contra los Lakers de Kobe Bryant, en un fenómeno conocido como ‘Linsanity’.
El jugador no pudo mantener ese nivel de estrella pero en su carrera en la NBA jugó para los Houston Rockets y los Lakers y fue parte del equipo de los Toronto Raptors que se proclamó campeón en 2019.
El pasado septiembre, tras una exitosa temporada en la liga de basquetbol china, Lin regresó a Estados Unidos para jugar en la G-League con la intención de hacerse un lugar en algún equipo de la NBA durante la temporada.