Facebook quiere volver a las andadas con una medida bastante polémica, quiere que no haya opiniones políticas ni religiosas en los perfiles de su red social.
La idea es quitar ese tipo de información de nuestro perfil, eliminar ese dato que indica que somos de derechas o de izquierdas, o que pertenecemos a una u otra religión.
Al quitar esa información, los haters no podrán atacarnos solo con ver nuestro perfil, aunque seguirán haciéndolo si publicamos contenido que refleje nuestros ideales.
De esta forma, nuestra página de Facebook dirá menos sobre nosotros, tal y como ha confirmado ya Meta al consultor Matt Navarra. Quitará la información «interesado en», puntos de vista políticos y religión de los perfiles de Facebook a partir del 1 de diciembre.
El movimiento está destinado a hacer que Facebook sea «más fácil de navegar y usar», de forma que si alguien tiene esos campos rellenados, recibirá una notificación indicando que se retirará.
Seguirá existiendo la información de contacto y el estado de nuestra relación, pero la información del perfil irá cambiando para ser menos transparente.
Aunque pueda parecer un cambio pequeño, hay mucha gente que va a la parte de «contacto e información básica» en busca de alguna información que pueda ser usada para su dosis diaria de adrenalina digital, por lo que seguramente sí se notará en el día a día de quien recibe mensajes anónimos amenazantes.