Por Ana Higuera| Tomado de 20 Bits
Las plataformas tecnológicas no asumen ninguna responsabilidad por los contenidos que suben los usuarios, debido a que solo es responsable quien crea dicho producto multimedia.
La Sección 230 de la Ley de Decencia en las Comunicaciones de Estados Unidos (1996) les otorga una especie de inmunidad con fundamento en la libertad de expresión, no obstante, hay polémica por como las redes sociales utilizan dicha normativa.
En un principio no pueden censurar a los internautas, pero hay veces que eliminan determinadas publicaciones. The Washington Post señala que “la Corte Suprema escuchará un caso que prueba los límites de la Sección 230, la disposición legal de Estados Unidos que protege a las empresas de la responsabilidad por las publicaciones de terceros”.
La Sección 230 se aprobó en 1996, sienta las bases para Internet, y se encarga de inmunizar a los sitios web de ser considerados como responsables por lo que publican sus usuarios. En pocas palabras, protege a cualquier propietario o usuario de un ‘servicio informático interactivo’.
La ley genera controversia desde años, por consiguiente, los políticos de Estados Unidos han pedido una reforma. A pesar de que el problema no está relacionado con la Sección 230 (sino con la limitación de la libertad de expresión), cualquier cambio puede evolucionar hacia un mayor poder censor en las plataformas de Internet.
Los políticos podrían llevar a cabo cualquier tipo de filtro impuesto, aunque también existe la posibilidad de que cambien las reglas de Internet y desmonten la capacidad de monetización de varias empresas.
Pero, ¿por qué es tan importante la Sección 230 últimamente? Jeff Kosseff (profesor asociado de la Academia Naval de Estados Unidos) explica para The New York Times que “es la primera vez que la Corte Suprema acepta escuchar un caso que permite interpretar la Sección 230”, debido a que los gigantes tecnológicos podrían estar protegidos de la desinformación y el posible contenido ‘violento’ que circula en las plataformas.
El caso de YouTube
La Corte Suprema de Estados Unidos podría evaluar su aplicación en un juicio, donde se acusa a Google de permitir que YouTube promocionase al Estado Islámico y publicaciones relacionadas con la guerra.
Hablamos del caso Nohemí González, una estudiante de 23 años que murió en un ataque terrorista del Estado Islámico en 2015 en París. La demanda alega que YouTube ‘ayudó’ al grupo extremista, además, los algoritmos recomendaban vídeos relacionados con el terrorismo.
La denuncia señala que los funcionarios de la red social ayudaban al Estado Islámico, teniendo en cuenta que los demandantes citaban en la solicitud que “los vídeos fueron la forma central en que ISIS reclutó apoyo”. Por el contrario, Google argumentó que “la denuncia no alega que ningún terrorista vio tal recomendación o que tales recomendaciones tuvieran alguna conexión con el ataque de París”.
Los Ángeles Times afirma que “un juez desestimó el caso y un tribunal federal de apelaciones ratificó esa decisión. Bajo las leyes estadounidenses -específicamente la Sección 230 de la Ley para la Decencia en las Comunicaciones- las compañías de Internet no pueden ser culpadas por el material que sus usuarios publican en ellas”.
Twitter también está involucrada
La Corte Suprema también considerará una demanda separada, pero relacionada, que involucra a Twitter. El caso fue presentado por familiares de Nawras Alassaf, quien murió en un ataque terrorista en Estambul en 2017. El reclamo acusa a Twitter, Facebook y Google de violar la Ley Antiterrorista al permitir que el Estado Islámico usara sus redes sociales.
No obstante, los tribunales inferiores no abordaron directamente el tema de la Sección 230 en este caso, y Twitter solicitó que la Corte Suprema considerara el caso si también escuchaba la demanda de Google.