Guillermo Moreno, candidato presidencial de Alianza País (ALPAIS), planteó este lunes una serie de temas y medidas que considera deben ser las prioridades a asumir por el nuevo gobierno que tome posesión a partir del 16 de agosto frente a los retos que ha impuesto al país la pandemia del Covid-19 en lo económico, social, educativo, cultural y de salud pública.
“La crisis sanitaria y económico social en desarrollo plantea, al gobierno que tome posesión el 16 de agosto, definir cuáles serán sus prioridades para el periodo agosto-diciembre, que a su vez sentarán las bases de las perspectivas del país para el 2021. El mismo 16 de agosto es necesario abrir un diálogo con la diversidad de sectores del país para concertar una agenda nacional de responsabilidades compartidas”, expresó, Guillermo Moreno.
Como parte del programa de gobierno del candidato presidencial de Alianza País (ALPAIS) se establece como una prioridad que desde el mismo 16 de agosto se impulse un diálogo nacional que permita establecer una agenda con las líneas gruesas para la reestructuración y adaptación del actual Presupuesto General del Estado, así como las perspectivas generales del presupuesto de 2021, que deben estar centradas, apuntó Moreno, en una estrategia nacional eficaz para enfrentar la pandemia del coronavirus.
Para Guillermo Moreno, ante las claras señales de que difícilmente, en lo que resta del año se normalice el turismo, las exportaciones, el envío de remesas, el país debe adoptar una Economía de Emergencia Nacional, afincandose en el aparato productivo del país, apostando por el impulso de la producción agropecuaria y la agroindustria enfocados en garantizar la alimentación de la población y la exportación.
Indicó además que no se puede dejar fuera a las Mipymes, sector productivo que requiere de especial atención en esta coyuntura. Respecto de los sectores más vulnerables, plantea, impulsar un seguro de desempleo para beneficiar a trabajadores suspendidos o cesantes y para los trabajadores informales que no puedan laborar, respaldado con recursos de las ganancias de la AFP y ARS.
Manifestó también que el nuevo gobierno no le debe temblar el pulso para manejar con pulcritud y transparencia los recursos públicos, enfrentando todo acto de corrupción y dispendio. Además, entre otras, deben ser eliminas todas las instituciones públicas con funciones duplicadas o sin reales atribuciones; reducción de los sueldos de lujo de los altos funcionarios del Estado; impulsar la eliminación del “barrilito”, “cofrecito”, exoneraciones y privilegios a legisladores y otros funcionarios; suprimir toda forma de opacidad en el gasto público.