El reconocido sacerdote de La Vega, conocido cariñosamente como Padre Chelo, sorprendió a la comunidad católica al embarcarse en un viaje nostálgico y espiritual que lo llevó de regreso a los momentos más simples y felices de su infancia.
Durante esta travesía especial, el Padre Chelo tuvo la oportunidad de visitar un pequeño río que fue testigo de su niñez. Con una sonrisa en el rostro y el corazón lleno de recuerdos, decidió hacer algo que no había hecho en más de tres décadas: sumergirse en las cristalinas aguas del río.
El momento fue capturado en video que rápidamente se difundieron en redes sociales, donde seguidores y feligreses expresaron su alegría y admiración por la conexión tan profunda que el Padre Chelo mantiene con su pasado y su fe.
El Padre Chelo es conocido en la región por su hermoso ministerio de sanación y su cercanía con los más necesitados. Esta experiencia no solo le permitió conectarse con su propia historia, sino también inspirar a otros a encontrar la felicidad en los recuerdos y en los pequeños momentos de la vida.