En una entrevista ofrecida al programa Esto No Tiene Nombre, Lorenny Solano, presidenta de la Federación Dominicana por los Derechos de los Animales (FEDDA), expresó su preocupación acerca del reglamento de cacería que está siendo desarrollado por el Ministerio de Medio Ambiente, que contiene a perros y gatos callejeros dentro de la categoría “caza de control”.
Solano argumentó que esta clasificación es errónea, ya que tanto los perros como los gatos son animales domésticos que han convivido con los seres humanos durante miles de años.
Durante la entrevista, Solano señaló que en el proceso de creación del reglamento de cacería no se tomó en cuenta la existencia de la Ley 248-11 de Protección Animal y Tenencia Responsable, vigente en el país. Esta ley prohíbe matar animales por deporte o diversión, y su omisión en el reglamento es un punto preocupante para FEDDA.
Solano hizo hincapié en la diferencia entre sacrificar a un animal que representa una plaga y hacerlo por mero entretenimiento. Según ella, el problema no radica en la caza con armas de fuego, sino en otorgar licencias para matar perros y gatos callejeros. Enfatizó que la esterilización es una alternativa más efectiva y humana.
Además, cuestionó la decisión del Ministerio de Medio Ambiente de reglamentar en favor de una minoría, yendo en contra de la opinión de la mayoría de la población que se opone a esta medida. También expresó su frustración por la falta de cumplimiento efectivo de las leyes de protección ambiental en el país durante los últimos 11 años.
En cuanto a soluciones, Solano propuso que los ayuntamientos destinen terrenos para albergar animales e, incluso, establezcan clínicas veterinarias para financiar los gastos asociados. Sin embargo, destacó que FEDDA continúa su campaña de oposición al reglamento, aunque reconoce que el Ministerio de Medio Ambiente tiene la última palabra.
La discusión sobre el reglamento de cacería y la inclusión de perros y gatos callejeros como objetivo de caza continúa generando debate en la sociedad dominicana. Aunque se están buscando consensos, la aprobación final del reglamento por parte del ministerio sigue siendo incierta.