La Pastoral de la Juventud de la Arquidiócesis de Santo Domingo en cabeza de Monseñor Francisco Ozoria Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, el Reverendo Padre Francisco Benito Alvarado, Vicario Episcopal de Pastoral de Adolescencia y Juventud, Reverendo Padre Amadís Socorro Ovalle, delegado arquidiocesano de Pastoral universitaria, sacerdotes, religiosos y una nutrida participación de jóvenes de varias parroquias y Centros Educativos celebraron el Día Nacional de la Juventud con una solemne eucaristía en la Catedral Primada de América.
Cada 31 de enero, la Iglesia Católica celebra al santo patrono de la juventud, San Juan Bosco, más conocido por todos como Don Bosco, quien fue el fundador de diversas comunidades religiosas, agrupaciones e iniciativas que componen lo que se denomina como la Familia Salesiana. Por su dedicación a la formación de niños y jóvenes fue declarado “Padre y maestro de la juventud” por el Papa San Juan Pablo II el 24 de mayo de 1989.
Durante su homilía Monseñor Francisco Ozoria Acosta explicó el camino que recorre la arquidiocesis en la dinámica de sinodalidad, que es la verdadera identidad de la iglesia. Además invitó a los jóvenes a integrarse: “… los jóvenes como en la familia, la parroquia y en la arquidiócesis son tenidos en cuenta para vivir la fe y en esos espacios queremos que los jóvenes se integren a vivir la sinodalidad, pues es la cédula de identidad de la iglesia. Si nosotros no caminamos juntos como iglesia, significa que no estamos trabajando como iglesia de Jesucristo; porque él nos pide a nosotros que caminemos juntos, que vivamos la comunión cristiana”.
También estuvo presente el Ministro de la Juventud Rafael J. Féliz García, quien dirigió un mensaje al terminar la eucaristía: “…sin lugar a dudas todos tenemos cosas que agradecer en representación de cada uno de ustedes, siendo joven entre ustedes le agradezco a Dios, a la Iglesia y a la sociedad dominicana que han hecho de jóvenes comunes y ordinarios como nosotros, jóvenes con principios éticos y con valores de humanismo cristiano como la honestidad, la transparencia y también la justicia. Hoy me sumo a la expresión de Don Bosco, “Me basta que sean jóvenes para amarlos” y es así me basta que sean jóvenes para apoyarlos, escucharlos y para impulsar proyectos en beneficio de todos los jóvenes dominicanos en especial de los que apoyó san Juan Bosco, jóvenes que están en condición de vulnerabilidad”. Al final de sus palabras manifestó su compromiso con el apoyo a 200 jóvenes para participar en la próxima Jornada Mundial de la Juventud que se realizará en Portugal.
El reverendo Padre Benito Alvarado, en su saludo a las personalidades y entidades que trabajan por la juventud, subrayó la estrategia de trabajar en conjunto, en sinodalidad (como claramente indicó Monseñor Ozoria en su homilía) por eso la presencia del ministro de la Juventud y los lazos que se han venido estrechando con los miembros de los partidos políticos que representan los Departamentos de juventud, además el licenciado Carlos Manuel Guerrero, Director Nacional de Atención Integral para adolescentes en conflicto con la ley, y el grupo de Jóvenes Internos del Reformatorio San Cristóbal, Pedro Batista miembro de la dirección central del Partido de la Fuerza del Pueblo, Maikel Casilla presidente de Juventud Provincial del PRM.
“Hemos querido que se integren grupos y personas que trabajan directamente con los jóvenes para buscar en el ejercicio de la vida cristiana, de la política, y en el ejercicio de cada una de las cosas que hacemos; las cosas que tenemos en común y sobre todo aquellas que favorecen la vida integral de los jóvenes, la totalidad de los jóvenes” explicó el Reverendo Padre Benito.
Para finalizar invitó al lucernario que se realizará hoy 31 de Enero a las 7:00 p.m. el Santuario de La Altagracia en la zona colonial, con la finalidad de celebrar el Día de la Juventud ofreciendo una luz por la honestidad, por la claridad, por la integridad de los jóvenes y aprovechando también para orar para que en cada uno de los espacios de decisiones de poder del país incluyendo el poder político, poder judicial y también el servicio cristiano, la vida de la iglesia siempre esté marcada por la honestidad y por la integridad.
Fragmento del mensaje de la pastoral Juvenil a todos los jóvenes: Aspiramos y a la vez llamamos a los jóvenes a ser verdaderos “influencers” de la verdad y del bien, de la construcción de una humanidad más justa y solidaria, donde podamos emprender el camino de la verdad, juntos y con la misma meta. Las luchas, aventuras y comportamiento de los jóvenes responden a esta llama encendida que crece en su interior y que les obliga a salir cada día a conquistar su propia vida, su deseo de éxito. Para conseguir la felicidad hay que apegarse a la honestidad, hay que apegarse a la justicia y hay que apostar a la construcción del bien.