Con el propósito de mitigar la contaminación sónica y la emisión de gases en favor del medio ambiente, la Fundación Natural Power, lanzó el proyecto de movilidad eléctrica “E-Delivery”, que busca brindar facilidades a los propietarios de colmados para que hagan la transición de motores de combustión a silenciosas motocicletas eléctricas.
La directora ejecutiva de la fundación, Laura Rojas, manifestó que el proyecto inició hace dos meses como un piloto, con una meta mínima de cambiar 265 motores de gasolina a eléctricos en sectores específicos del Distrito Nacional.
Rojas destacó que la importancia de este proyecto es que los deliveries de los establecimientos que forman parte del mismo reciben capacitación vial y acceso a servicios básicos, entre ellos: el seguro de salud, en alianza con el Gobierno.
Así mismo, detalló que el servicio de delivery con motores eléctricos representa un beneficio directo al colmadero, ya que se estaría ahorrando unos 8,000 pesos por cada motor que decida cambiar.
Laura Rojas destacó que las ventajas que tienen los motores eléctricos que distribuye la empresa Celeste Motors es que además del ahorro en combustible, son silenciosas y los deliveries no pueden exceder la velocidad a más de 50km/h, lo que también se traduce a más seguridad para el trabajador.
“Hemos podido ya ver muchos testimonios de residenciales que le abren las puertas a los motores, a los delivery porque ya no hacen ruidos, porque ya no contaminan”, expresó.
Aunque E-Delivery es un proyecto ejecutado por la Fundación Natural Power, está siendo apoyado por diversas entidades públicas y privadas, entre ellas: El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Servecería Nacional, Banfondesa, el INTRANT, Alcaldía del Distrito Nacional y Celeste Motors como principal aliado comercial, y con la cual firmaron un acuerdo, por ser la empresa que tiene la motocicleta “Súper King Kong”, que reúne las condiciones para este tipo de trabajo, por la autonomía y resistencia, según explicó Laura Rojas.
Por su parte, los colmaderos que forman parte de E-Delivery, afirmaron que les ha ido bastante bien, debido a que tienen un ahorro considerable en combustible, el ruido ya no es un problema, ni tampoco dejan la mancha de aceite donde los estacionan.
En tanto, que los deliveries expresaron que se sienten más cómodos con ellos, ya que les da menos trabajo prender los motores eléctricos y los vecinos no se quejan del ruido.