El caracol gigante africano (Lissachatina fulica), se detectó por primera vez sobre territorio nacional, en la provincia La Altagracia, la cual se ha extendido, activando las alertas por ser una de las especies más dañinas del mundo.
Según el biólogo Brígido Hierro, técnico del Departamento de Recursos Genéticos de la Dirección de Biodiversidad y Vida Silvestre del Ministerio de Medio Ambiente, la especie se ha esparcido por La Altagracia, pasó a La Romana y se evalúa su posible presencia en El Seibo y Hato Mayor.
En el Plan de Control y Monitoreo en República Dominicana, participan el ministerios de Agricultura, Salud Publica, Medio Ambiente y Turismo.
Francisco Martínez Pujols, del Programa de Control del Caracol Gigante del Ministerio de Agricultura, el mayor impacto negativo de ese caracol es provocado al área agrícola porque suelen atacar la papaya, melón, zanahoria, ñame blanco, plátano y cacao, entre otros alimentos.
El molusco es originario del este y norte de África y ampliamente dispersa en esos territorios, fue introducida con diferentes propósitos en Asia, el Pacífico, América y el Caribe, especialmente Trinidad y Tobago.
Muchas personas usaban dicho caracol como mascotas y en los años 80, algunos países lo tomaron de fuente de proteína, establecieron granjas para la cría de este molusco con la idea de generar alimento humano.
El caracol gigante africano puede actuar como un hospedero intermediario de Angiostrongylus cantonensis, un gusano milimétrico que causa la meningoencefalitis en los humanos, lo cual causa Inflamación del cerebro y los tejidos que lo rodean, y los síntomas pueden ser pueden ser fiebre, confusión, vómitos y convulsiones.
El animal es húmedo, elástico y resbaloso; posee dos pares de tentáculos, el más corto es táctil y quimiotáctico, el par superior es más largo, con manchas de ojos en las extremidades, es hermafrodita protándrico: primero madura el masculino en adultos y luego la hembra, normalmente menos de un año, aunque algunos casos puede ocurrir hasta a los cinco meses.
“Después de un apareamiento tienen la capacidad de almacenar esperma, pudiendo poner más de 100 huevos en una postura, y alcanzar hasta mil 200 óvulos en un año. Los huevos son color blanco-amarillento a amarillos”, precisó el especialista Brígido Hierro.
En 2021, el Decanato de la Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), en coordinación con el Ministerio de Agricultura y el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OINSA), realizaron el curso internacional sobre “Identificación de Moluscos con Énfasis en el Caracol Gigante Africano”.
Dicho evento tuvo como propósito conocer las características que se utilizan para identificar los moluscos, conocer moluscos terrestres de importancia agrícola y conocer el manejo del caracol plaga Lissachatina fulica.
Para ese entonces, se estableció que el caracol gigante africano, no representa peligro para la mayoría de las provincias del país, porque se confinó en Bávaro, Punta Cana e Higüey, Provincia La Altagracia, gracias al control establecido por el Ministerio de Agricultura desde el 2016.