La Universidad Autónoma de Santo Domingo y el Ministerio de Obras Públicas avanzan en los trabajos de remodelación de la Residencia Estudiantil, que hospeda a estudiantes de escasos recursos que en su mayoría provienen de provincias del país.
Actualmente, el edificio de 11 plantas, con 10 de niveles de 14 habitaciones cada uno, además de cocina, biblioteca, centro de internet y lavandería, entre otros espacios; está desocupado como medida de prevención por la pandemia, según afirma Diógenes Gutiérrez, administrador de la residencia.
Gutiérrez explica que el edificio ubicado en Villa Juana, no está funcionando, porque al igual que en los centros educativos, por disposición del Ministerio de Salud Pública y el Ministerio de Educación Superior, la docencia de la UASD pasó a modalidad virtual y se decidió que los estudiantes se retiraran a sus casas para evitar cualquier brote del virus, pues cada uno de los pisos de hospedaje tiene 14 habitaciones ocupadas por dos estudiantes cada una.
Mientras se discute el protocolo para permitir el hospedaje, por lo menos a los que más lo necesiten, el edificio está siendo intervenido por el Ministerio de Obras Públicas, que avanza los trabajos de remodelación que ya habían sido iniciados anteriormente.
La biblioteca y cinco pisos de habitaciones ya están terminados en casi un 90 por ciento y se construyó un pozo tubular para mejor manejo del agua. Los pisos que no se han trabajado se van a intervenir para que el edificio completo tenga ya las condiciones adecuadas para albergar la totalidad de estudiantes.
“En una segunda fase se intervendrá la cocina, el centro de internet y la lavandería. Se espera que Obras Públicas inicie lo más pronto posible esta fase de remodelación”, detalló Gutiérrez.
Los inicios de la remodelación
La remodelación, iniciada en la gestión actual de la doctora Emma Polanco Melo como rectora, en principio se realizaba manteniendo 5 plantas ocupadas por estudiantes hospedados, que aunque no estaban en condiciones ideales, eran habitables.
“Pero la universidad no contaba con otro edificio de esas características. Entonces la rectoría propuso que para que los estudiantes no perdieran esta oportunidad, Obras Públicas interviniera las áreas que estaban inhabitables, y que en los otros cinco pisos se mantuvieran viviendo estudiantes, mientras se completaba la remodelación”, realidad que cambió por la llegada de la pandemia.
Adelanta que los estudiantes se integrarán de nuevo al edificio, cuando en los organismos correspondientes se discuta y socialice el protocolo que han elaborado para esos fines y se establezca la mejor manera de acogerlos de nuevo sin peligros de contagio.