Con una población de 10,044 internos en 22 recintos en todo el país, el Modelo de Gestión Penitenciaria ha reportado 503 casos de Covid-19 desde marzo de 2020, de estos, 12 permanecen activos y en condición de aislamiento y 491 se han recuperado de la enfermedad.
Como parte de los programas para la prevención de la enfermedad provocada por el coronavirus SARS-CoV-2, al 28 de enero se han tomado 6,520 muestras para pruebas PCR, de las cuales 6,017 han resultado negativas y las 503 ya citadas fueron positivas.
El informe del MGP destaca, además, que 132 personas de nuevo ingreso se encuentran en observación, un interno permanece aislado con síntomas de gripe y otros seis están separados del resto por problemas de salud no relacionados con el COVID-19.
También se reportó la muerte de un interno cuya prueba rápida de entrada arrojó un resultado negativo y falleció con síntomas de la enfermedad en un centro médico privado, a los cinco días de haber ingresado al Centro de Corrección y Rehabilitación Vista al Valle, de San Francisco de Macorís.
El Modelo de Gestión Penitenciaria continúa con el protocolo de detección, prevención y atención a casos de COVID-19, con medidas de distanciamiento, aislamiento y asistencia médica a los casos detectados, así como la realización de pruebas rápidas al momento del ingreso y PCR cuando los internos presentan algún síntoma compatible o sospechoso de la enfermedad.
Los Centros de Corrección y Rehabilitación, así como los Centros de Atención Provisional (preventivos) disponen de un estricto manual de procedimientos que responde al citado protocolo, por lo que antes del ingreso de cada persona se le aplica una prueba rápida y se le mantiene en observación.
Si en algún momento el privado de libertad presenta síntomas compatibles con la enfermedad, se le aísla, se realiza una prueba PCR y se refiere a asistencia médica, donde se determina si es necesario el traslado a un centro médico del Sistema Nacional de Salud o a uno privado si así lo solicita el interno.