Aunque este año no habrá el desfile en una patana por todo Santiago como tradicionalmente se hace en cada campeonato de Águilas Cibaeñas, gran parte de la fanaticada realizó su caravana, a pesar del Toque de Queda.
El tránsito en la ruta Santiago-San Francisco, pasada la media noche parecía hora pico, ya que las personas salían a esperar que pasara el equipo campeón con su corona 22 y se sumaban a la fila de vehículos.
Bocinas tipo bluetooth en manos, ollas y calderos eran de los instrumentos que tenían para festejar.