El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, llegó a Irak para su primera visita en seis años en una muestra de “solidaridad” tras la prolongada crisis política del país.
Guterres dijo que quería demostrar “solidaridad con el pueblo y las instituciones democráticas de Irak, una solidaridad que significa que Naciones Unidas está totalmente comprometida en respaldar la consolidación de las instituciones en este país”.
También dijo que quería expresar su “confianza en que los iraquíes serán capaces de superar las dificultades y los desafíos que todavía enfrentan a través de un diálogo abierto e inclusivo”.
Guterres, que aterrizó en la noche del martes al miércoles a Bagdad, debe reunirse el miércoles con el primer ministro Mohamed Shia al Sudani y con representantes de grupos de derechos de mujeres y jóvenes.
El jueves, visitará un campo para gente desplazada en el norte del país antes de acudir a Erbil para encontrarse con representantes del gobierno regional del Kurdistán iraquí.
Su última visita a Irak se remonta a la primavera boreal de 2017.