No es ningún misterio quién disparó y mató a cinco personas en un club nocturno gay en Colorado Springs el año pasado, pero qué motivó a esa persona a atacar un lugar que durante mucho tiempo había sido un santuario para la comunidad LGBTQ en el ciudad en su mayoría conservadora sigue siendo desconocida.
Eso podría cambiar durante una audiencia que comenzó el miércoles en una sala repleta de víctimas y sus familiares. Los fiscales deben presentar suficiente evidencia para respaldar su acusación de que fue un crimen de odio cuando Anderson Lee Aldrich, de 22 años, quien no es binario, abrió fuego en el Club Q esa noche.
Aldrich apareció en la audiencia con un mono naranja de la cárcel, mientras que uno de los patrocinadores que puso fin al ataque, el veterano del ejército Richard Fierro, se sentó en la última fila.
A diferencia de otras acusaciones, como asesinato e intento de asesinato, los cargos por delitos de odio requieren que los fiscales presenten evidencia de un motivo: que Aldrich fue motivado por prejuicios, ya sea en su totalidad o en parte. Eso podría incluir declaraciones que Aldrich, que usa pronombres ellos/ellos, hizo en las redes sociales o a otras personas, dijo Karen Steinhauser, abogada litigante, exfiscal y profesora de derecho en la Universidad de Denver que no está afiliada al caso.
Hasta ahora, los fiscales no han revelado nada sobre por qué acusaron a Aldrich de un crimen de odio.
Aldrich era conocido por familiares y amigos y en documentos oficiales del gobierno como hombre hasta que los abogados defensores revelaron después del tiroteo que Aldrich no era binario. Alguien que es miembro de un grupo de personas, como la comunidad LGBTQ-plus, aún puede ser acusado de un delito de odio por atacar a sus compañeros. Las leyes sobre delitos de odio se centran en las víctimas, no en el perpetrador.
Los fiscales por lo general ganan las audiencias preliminares ya que el estándar de la prueba es más bajo que en el juicio y la evidencia debe ser vista de la manera más favorable para ellos. Pero los abogados defensores a veces todavía quieren continuar con las audiencias preliminares porque ofrecen la oportunidad de interrogar a los testigos bajo juramento, incluidos los investigadores, y aprender más sobre el caso del gobierno de lo que podría estar disponible en los informes que probablemente ya les hayan entregado. dijo Steinhauser.
El tiroteo fue capturado en un video de vigilancia. Según una declaración jurada de arresto, el video mostraba a Aldrich ingresando a un estacionamiento en el Club Q justo antes de la medianoche y saliendo con un chaleco balístico y un rifle estilo AR-15. Poco después de entrar, Aldrich abrió fuego indiscriminadamente contra los clientes, según la declaración jurada.
Se desconoce si Aldrich tenía antecedentes en el club o alguna disputa con los patrocinadores. Sus abogados revelaron durante una audiencia reciente que Aldrich estuvo en el club más temprano esa noche durante aproximadamente una hora y media, pero no dijeron por qué ni dieron más detalles.
Fuente: AP
