Moscú, Rusia. Varios barrios de Moscú quedaron envueltos este jueves en una neblina con olor a quemado, causada por los importantes incendios forestales que asolan una región cercana, en plena ola de calor en Rusia.
Según la Agencia federal de Bosques (Rosleskhoz), fueron desplegadas 850 personas y 300 dispositivos, como aviones y helicópteros, para combatir las llamas que devoran la región de Riazan, a unos 250 kilómetros al sureste de la capital.
La oenegé Greenpeace, que se basa en imágenes satelitales, informó que el fuego ha afectado ya a más de 3.300 hectáreas. En Telegram, el gobernador interino de la región, Pavel Malkov,declaró el miércoles por la noche que al menos 800 hectáreas habían sido pasto de las llamas.
El jueves temprano, afirmó que tres incendios seguían activos, en una superficie de 181 hectáreas, incluyendo la reserva natural de Oka y el parque nacional Meshchiorski, unas áreas pantanosas.
En un comunicado, la agencia Rosleskhoz acusó al as autoridades forestales de haber “ocultado la extensión real” de los incendios, lo que “impidió que las fuerzas federales fueran movilizadas a tiempo”.
“Se desconocen las causas del fuego, pero no se ha observado ninguna tormenta ni ninguna causa natural en la zona, así que quizá sea de origen humano”, apuntó este jueves Greenpeace, que envió a la zona un equipo de bomberos.
Con el cambio climático, Rusia se ha visto azotada en los últimos años por graves incendios forestales, sobre todo en Siberia y en el Extremo Oriente, unas zonas gigantescas y de difícil acceso.