Moscú, Rusia. Rusia introdujo el miércoles duras penas de cárcel para quienes insten a actuar contra la seguridad, un texto adoptado por los diputados en momentos en que Moscú reprime todas las voces que se oponen a su ofensiva militar en Ucrania.
La ley, que prevé penas de hasta siete años de cárcel por este crimen, fue votada el miércoles por la Duma Estatal, la cámara baja del Parlamento ruso, que también endureció las penas por espionaje y los casos de “colaboración confidencial con extranjeros”.
Oficialmente, estos textos de ley buscan “proteger los intereses nacionales de Rusia”.
Son “una respuesta adecuada y oportuna a los retos a los que se enfrenta nuestro país”, dijo en un comunicado el diputado Vasiliy Piskariov, del partido gobernante Rusia Unida.
En virtud de las nuevas disposiciones, instar públicamente a actuar contra la seguridad de Rusia serán ahora castigado con entre dos a cuatro años de prisión.
La pena puede aumentar a cinco años si tales llamamientos se realizan en los medios de comunicación y a siete si las hace un grupo organizado.
La entrega al enemigo de información “que pueda ser utilizada contra las fuerzas armadas rusas” será castigada con hasta 20 años de prisión.
Los casos de “colaboración confidencial con extranjeros” serán castigados con hasta 8 años de cárcel.
Desde el inicio de la operación militar rusa en Ucrania el 24 de febrero, las autoridades rusas han intensificado la represión de las voces críticas con la ofensiva.
Han bloqueando medios de comunicación independientes y redes sociales, y aprobado leyes que sancionan con fuertes penas de cárcel cualquier forma de crítica que empañe la imagen del ejército.
Varios rusos — tanto opositores como ciudadanos de a pie — ya han sido encarcelados acusados de este tipo de cargos a la espera de ser juzgados. Un diputado de la ciudad de Moscú será juzgado el jueves.