El presidente ruso, Vladimir Putin, cree que no puede darse el lujo de perder en Ucrania y está “doblando su apuesta” en la guerra, pero no muestra signos de planear el uso de armas nucleares tácticas, dijo el sábado el director de la CIA, Bill Burns.
A pesar del fracaso de las fuerzas rusas en capturar Kiev y sus dificultades en los principales frentes en la región sureste del Donbás, el líder ruso persiste en su opinión de que sus tropas pueden derrotar a las de Ucrania, afirmó Burns.
La mantiene “a pesar de derrotas clave en el campo de batalla”, afirmó el jefe del espionaje estadounidense en una conferencia del Financial Times. “Creo que tiene un estado de ánimo en el que no cree que pueda darse el lujo de perder”, señaló.
De acuerdo a Burns, Putin está “preocupado” desde hace años años por Ucrania, que fuera parte de la Unión Soviética, en una “combinación muy combustible de agravio, ambición e inseguridad”.
“Apostó mucho por las decisiones que tomó para lanzar esta invasión. Creo que está convencido en este momento de que redoblar su esfuerzo le permitirá progresar”.
Armas nucleares tácticas
Burns, exembajador de Estados Unidos en Rusia que pasó mucho tiempo estudiando a Putin, dijo que ni la CIA ni otras agencias de inteligencia occidentales ven señales de que Moscú esté preparado para desplegar armas nucleares tácticas para obtener una victoria en Ucrania o atacar a los partidarios de Kiev.
Rusia puso sus fuerzas nucleares en alerta máxima poco después de lanzar la invasión el 24 de febrero. Desde entonces, Putin ha hecho amenazas apenas veladas que insinúan su voluntad de desplegar armas nucleares tácticas si Occidente interviene directamente en el conflicto de Ucrania.
“No vemos, como comunidad de inteligencia, evidencia práctica en este punto de la planificación rusa para el despliegue o incluso el uso potencial de armas nucleares tácticas”, señaló Burns.
“Dado el tipo de ruido de sables que (…) hemos escuchado de los líderes rusos, no podemos tomar a la ligera esas posibilidades”, matizó. “Así que nos mantenemos muy enfocados como servicio de inteligencia en un momento en que hay mucho en juego para Rusia”, dijo.
Burns no ofreció ninguna evaluación de la situación actual en el campo de batalla.
China “sorprendida”
Pero sostuvo que China, país al que Washington ahora ve como su principal adversario, está estudiando de cerca las lecciones de la guerra y lo que significa para sus planes de tomar el control de Taiwán.
Según Burns, el presidente chino Xi Jinping sigue pensando en incorporar Taiwán a China, por la fuerza si es necesario. Pero Pekín se ha “sorprendido” por el mal desempeño de las fuerzas militares rusas, así como por la dura resistencia de la sociedad ucraniana y el fuerte apoyo que Occidente ha brindado a Kiev, añadió el número uno de la CIA.
La experiencia de Rusia en Ucrania probablemente esté afectando el cálculo de China “sobre cómo y cuándo” intentará hacerse con Taiwán, que China considera una provincia renegada. “Creo que les ha llamado la atención la forma en que la OTAN se ha unido para imponer costos económicos a Rusia como resultado de esa agresión”, continuó.
A Pekín le “perturba” que Putin haya logrado, contra su voluntad, “acercar a europeos y estadounidenses”, dijo Burns. “Qué conclusiones extrae de todo eso sigue siendo un signo de interrogación”.
“Creo que el liderazgo chino está analizando todo esto con mucho cuidado, los costos y las consecuencias de cualquier esfuerzo por usar la fuerza para obtener el control de Taiwán”.