El órgano más representativo de la ONU adoptó este miércoles una resolución en la que exige a Rusia que retire de inmediato, por completo y sin condiciones todas sus fuerzas militares del territorio de Ucrania.
Osos de peluche, jirafas, lobos, zorros y conejos, a veces acompañado de una bandera amarilla y azul, estuvieron en las mesas de muchos delegados, durante la votación sobre la guerra en Ucrania: una resolución que condena la invasión rusa con 141 países votando a favor, cinco en contra y 35 abstenciones.
El sentido de la iniciativa es que se enfatice el valor del voto para las generaciones futuras.
El voto se llevó a cabo luego de más de dos días de un debate en el que casi 120 representantes coincidieron en la necesidad de una solución pacífica a la crisis, aunque desde diferentes perspectivas.
Las resoluciones de la Asamblea General no son vinculantes, pero reflejan la posición de los 193 Estados miembros de la ONU. La sesión de especial de emergencia y la decisión de la Asamblea se producen después de que el viernes pasado Rusia vetase una resolución en parecidos términos que habría permitido al Consejo tomar medidas, entre ellas las militares, para obligar a su cumplimiento.
Además de la retirada militar rusa, el texto adoptado exige a ese país que ponga fin de inmediato al uso de la fuerza contra Ucrania y que revierta sin condiciones la decisión de reconocer la independencia de Donetsk y Luhansk.
Inmediatamente después de la votación, el Secretario General, quien estuvo presente durante toda la sesión al lado del presidente de la Asamblea, salió unos momentos de la sala para dirigirse a la prensa.
“La Asamblea General ha hablado. (…) El mensaje es alto y claro: Poner fin a las hostilidades en Ucrania, ahora. Silencien las armas, ahora. Abra la puerta al diálogo y la diplomacia, ahora”, declaró António Guterres.