AFP.- El Senado de Estados Unidos se disponía a aprobar el martes un enorme proyecto de ley de política industrial destinado a contrarrestar la creciente amenaza económica de su rival China, superando las divisiones partidistas para inyectar más de 170.000 millones de dólares en investigación y desarrollo.
La medida, una de cuyas disposiciones clave aborda la escasez de semiconductores que ha ralentizado la producción de automóviles este año, se considera crucial para los esfuerzos de Estados Unidos por evitar ser superado por Pekín en la carrera por la innovación tecnológica.
Con los dos partidos políticos estadounidenses cada vez más preocupados por la competencia de la mayor potencia asiática, el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, expresó su confianza en una fuerte votación bipartidista para aprobar la Ley de Innovación y Competencia de Estados Unidos.
“El proyecto de ley pasará a la historia como una de las cosas más importantes que ha hecho esta cámara en mucho tiempo, una declaración de fe en la capacidad de Estados Unidos para aprovechar las oportunidades del siglo XXI”, dijo Schumer en el pleno del Senado.
“Quien gane la carrera hacia las tecnologías del futuro será el líder económico mundial, con profundas consecuencias también para la política exterior y la seguridad nacional”.
El proyecto de ley tendría que volver a la Cámara de Representantes, donde se originó, para una votación final. Se espera que obtenga la aprobación en el Congreso y sea firmado como ley por el Presidente Joe Biden.
La propuesta pretende abordar una serie de áreas tecnológicas en las que Estados Unidos ha quedado por detrás de sus competidores chinos, incluida la producción de semiconductores.
El proyecto de ley destina 52.000 millones de dólares a financiar un plan previamente aprobado para aumentar la fabricación nacional de estos componentes.
También autoriza 120.000 millones de dólares a lo largo de cinco años para actividades de la Fundación Nacional de la Ciencia con el fin de avanzar en las prioridades, incluyendo la investigación y el desarrollo en áreas clave como la inteligencia artificial (IA) y la ciencia cuántica.
“Quien aproveche las tecnologías como la IA y la computación cuántica -e innovaciones aún no vistas- dará forma al mundo a su imagen”, dijo Schumer, antes de criticar al presidente chino, Xi Jinping.
Apuesta por el “liderazgo” de EEUU
Un resumen de la propuesta de ley señala cómo el Partido Comunista Chino está “invirtiendo agresivamente más de 150.000 millones de dólares” en la fabricación de semiconductores para controlar la tecnología avanzada.
El mes pasado, al iniciarse el debate sobre el proyecto, Schumer advirtió que los gobiernos autoritarios creen que las “democracias conflictivas” como la de Estados Unidos no pueden afrontar el momento e invertir en las prioridades nacionales del modo en que lo hace un gobierno centralizado.
“O cedemos el manto del liderazgo mundial a nuestros adversarios, o preparamos el camino para otra generación de liderazgo estadounidense. De eso se trata este proyecto de ley”, dijo el martes.
Aunque el principal republicano del Senado, Mitch McConnell, subrayó que la medida seguía siendo “incompleta”, parece que será aprobada por un amplio margen, lo que pone de manifiesto que la competencia de Estados Unidos con su creciente rival geopolítico, China, es uno de los pocos asuntos que pueden unir a republicanos y demócratas enfrentados.
La medida recibió el martes el apoyo del Secretario de Estado, Antony Blinken, que aplaudió sus inversiones en tecnología, innovación e investigación.
“Todos estos elementos juntos son la forma de acercarnos a China desde una posición de fuerza”, dijo Blinken en una audiencia en el Senado.