AFP.- La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, se negó este jueves a fijar una fecha para enviar al Senado la iniciativa de destitución contra Donald Trump, pero insistió en que “debe” realizarse un juicio, mientras el presidente Joe Biden apela a la unidad.
“Será pronto. No creo que tarde mucho, pero debe hacerse”, dijo a los periodistas la líder demócrata.
Añadió que el Senado deberá determinar la estructura de un juicio contra Trump, quien sería el primer expresidente estadounidense que enfrente ese proceso en el Congreso.
“Hablaré con los gestores (de la destitución) sobre cuándo estará listo el Senado para el juicio del entonces presidente de Estados Unidos por su papel en la instigación de una insurrección en el Capitolio… para socavar la voluntad del pueblo”, dijo Pelosi.
Biden, que asumió la presidencia del país el miércoles, se ha pronunciado contra Trump por haber inspirado a sus partidarios el 6 de enero a marchar hacia el Capitolio, donde provocaron unos violentos disturbios que dejaron cinco muertos, entre ellos un policía.
Sin embargo, Biden hizo de la unidad nacional un tema clave en su discurso de investidura el miércoles, diciendo que se debe “poner fin a esta guerra incivil” que enfrenta a los estadounidenses con diferentes perfiles políticos.
Pero Pelosi rechazó las preguntas sobre si proceder con un juicio perjudicaría el mensaje de unidad de Biden.
“No me preocupa eso. El hecho es que el presidente de Estados Unidos cometió un acto de incitación a la insurrección”, dijo.
“No creo que sea muy unificador decir: ‘Oh, olvidémoslo y sigamos adelante'”, añadió. “No es así como se unifica”.
El líder republicano del Senado, Mitch McConnell, ha dejado la puerta abierta para apoyar un juicio contra Trump, pero varios miembros de su bancada se han pronunciado en contra.
Llevar a Trump a juicio sólo “abriría la caja de Pandora”, dijo el miércoles a Fox News el senador Lindsey Graham, un estrecho aliado del expresidente, horas después de la toma de posesión de Biden.
Impugnar y condenar a un mandatario saliente “es un ejercicio político que dividirá aún más al país y, creo, acabará destruyendo la presidencia”, añadió.
Los parámetros de un juicio en el Senado serán determinados en gran medida por los demócratas, que ahora controlan la cámara.