La enorme cantidad de gente que se presentó a la Casa Rosa para darles el último a adio a su ídolo Diego Maradona, provocó caos y tensión.
El manejo se les escapó de las manos a las autoridades presentándose incidente hasta dentro de la Casa Rosa, con gente trepando las rejas libremente y moviéndose por el patio de las Palmeras como si fuera el patio de su casa.
Debieron retirar el féretro por los disturbios en las calles y tuvieron que evacuar a la familia y preparar el traslado del cadáver hasta el cementerio privado Jardín de Bella Vista, donde será enterrado.