Cassandre Jacques, representante de San Juan de la Maguana en el certamen de Miss Mundo Dominicana 2024, ha anunciado su renuncia como candidata, generando un amplio debate en la esfera pública. La joven aspirante al título tomó esta difícil decisión luego de que surgiera una controversia relacionada con su origen haitiano y su participación previa en otro concurso de belleza representando a Haití, lo cual desató críticas y cuestionamientos sobre su elegibilidad para representar a la República Dominicana en el prestigioso concurso de Miss Mundo.
En un comunicado sincero y cargado de emociones compartido a través de su cuenta de Instagram, Jacques expresó: “Con el corazón lleno de sentimientos encontrados y tras una profunda reflexión, quiero compartir una decisión que no ha sido fácil para mí: he decidido renunciar a mi participación en el certamen de Miss Mundo Dominicana”. Sus palabras reflejan el peso emocional de una elección compleja y desafiante, marcada por la dualidad de su identidad y la percepción pública.
La ahora ex-candidata detalló que su participación en Miss Mundo Dominicana había sido un sueño al que se había entregado con ilusión, esfuerzo y dedicación. Describió el proceso como una de las experiencias más significativas de su vida, lo que hizo que tomar esta decisión fuera particularmente doloroso. Jacques confesó que deseaba seguir compitiendo en este certamen, el segundo más importante del país, y reconoció que dar un paso atrás significaba renunciar a una meta por la que había trabajado incansablemente.
A pesar de las dificultades, Cassandre Jacques no dejó de agradecer a quienes la apoyaron durante su camino: “A lo largo de este proceso como participante he contado con el apoyo incondicional de mi familia, amigos y seguidores, quienes me han acompañado en cada paso del camino”, afirmó, destacando la gratitud profunda que siente hacia ellos. Este respaldo, según Jacques, fue vital para que lograra llegar al punto en el que se encontraba.
En su mensaje final, la joven dejó claro que su renuncia no representa un fin, sino un nuevo comienzo. “El no participar en la contienda no significa el final de mi camino, sino el inicio de una nueva etapa llena de proyectos, sueños y oportunidades que estoy dispuesta a abrazar con la misma pasión”, anunció con firmeza. Cassandre se despidió enfatizando que, aunque ya no suba al escenario de Miss Mundo Dominicana, se lleva consigo los aprendizajes, la fortaleza y la transformación que esta experiencia le brindó.
La situación de Jacques ha despertado diversas reacciones en la sociedad dominicana, suscitando reflexiones sobre la identidad, la inclusión y el significado de la representación en plataformas de esta magnitud. Para algunos, su historia es un testimonio de resiliencia y valentía; para otros, plantea preguntas sobre la manera en que los concursos de belleza y otras instituciones abordan las cuestiones de multiculturalidad e integración en un contexto nacional.