El PLD, mi partido, ha dado a conocer su posición sobre el tema migratorio. La respeto, pero debo decirlo con claridad: mi postura sobre este tema ha sido siempre la misma, ayer, hoy y siempre. No respondo a coyunturas ni a conveniencias. Mi compromiso ha sido con la República Dominicana, no con los intereses de ningún gobierno ni partido.
Durante los gobiernos del PLD levanté mi voz. Lo hice con respeto, pero también con firmeza. Exigí control migratorio, cumplimiento de la ley y defensa de nuestra soberanía. Hoy lo sigo exigiendo, con más fuerza aún, porque el problema ha crecido y se ha desnudado ante los ojos de todos. Ya no se puede seguir postergando lo que por dignidad nacional debimos enfrentar hace años.
Soy dominicano a carta cabal, y por eso digo: hay que actuar ya. Con respeto a los derechos humanos, sí. Con humanidad, por supuesto. Pero con decisión, con autoridad y con el corazón en la patria.
No hay excusa válida para seguir cruzados de brazos. La soberanía no se negocia. La ley no se dilata. Y la patria se defiende, siempre.
