El politólogo y analista internacional, Elvin Calcaño, realizó un análisis sobre la trayectoria política de Silvio Berlusconi, tras su fallecimiento este lunes.
A través de un hilo en Twitter, Calcaño destacó elementos claves de Berlusconi desde sus comienzos hasta el ocaso de su vida política.
Silvio Berlusconi, quien murió hoy, fue el primer político que utilizó exitosamente el populismo de derechas que hoy es central en muchos países y permitió a personajes como Trump llegar al poder. Berlusconi encarnó el triunfo cultural del reaccionarismo que hoy padecemos. Veamos…
Personajes como Berlusconi era imposible que ganaran elecciones en el contexto de la anterior hegemonía cultural del centroizquierda. Fue la hegemonía neoliberal iniciada en los 80 con Reagan y Thatcher lo que culturalmente habilitó las sociedades para este tipo de derechistas.
En un marco donde la gente ya no cree en la política como acción colectiva ni en las instituciones de mediación en términos de clase como partidos y sindicatos, emergió la figura de los millonarios “exitosos” como paradigma aspiracional y movilizador.
Berlusconi, así, fue el primer político que prescindió de un partido (en su sentido orgánico y programático tradicional) para proyectarse. Él era el partido y su historia de “éxito” lo que generaba adherencia transversalmente. Y supo convertir esa historia en conversación.
Y aquí el otro elemento clave de Berlusconi: el factor mediático. Berlusconi creó su propio ecosistema mediático -era dueño del principal emporio de medios masivos de Italia- donde a través de narrativas y símbolos se fue configurando una mayoría ideológica hacia la derecha.
En las sociedades neoliberalizadas de los 80 hacia acá, donde los partidos y la política como tal pierden capacidad de decir verdad, los medios se convierten en el espacio de construcción de ideología por excelencia. Berlusconi puso todo su aparato mediático privado en ello.
En ese contexto, Berlusconi amplió las fronteras ideológicas de la disputa política en Italia. De forma que cosas que antes era imposible decir ahora sean normales. Como sus insultos machistas, racistas y su imagen de millonario que “rompía las reglas” y siempre ganaba.
Fue con él que nació esa lógica política que recientemente puso a Trump y Bolsonaro en el poder. Donde ser de derechas es lo disruptivo y actuar como un patán que ofende minorías y se muestra sin filtros conecta orgánicamente con el deseo de expresar molestia de millones.
En conclusión: Berlusconi encarnó como nadie -y de primero- un cambio cultural fundamental de nuestro tiempo que pone al populismo de derechas en el lugar de la hegemonía cultural. Y que articula lo mediático con lo ideológico frente a públicos individualizados y molestos.
No podemos entender nuestro presente político e ideológico sin analizar a personajes como Berlusconi. Un tipo asquerosamente machista y racista que utilizó eso como su fuerte. Y que, como en el plano económico nunca se salió del libreto neoliberal, murió impune.