Un tratamiento que consiste en modificar genéticamente las células inmunitarias del cuerpo reduce en 74% el riesgo de avance de la enfermedad de personas con un tipo raro de cáncer de sangre, según los resultados del estudio publicados el lunes.
El ciltacabtagén autoleucel, también conocido por su nombre comercial Carvykti, se probó en un ensayo clínico en el que participaron 419 pacientes con mieloma múltiple que no respondían al tratamiento de quimioterapia comúnmente indicado con lenalidomida.
Si bien el uso de este último “se ha generalizado, también lo ha hecho la cantidad de pacientes cuya enfermedad ya no responde al tratamiento”, dijo la oncóloga Oreofe Odejide en la reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Oncología Médica, donde se presentaron los resultados.
Carvykti “ofrece resultados notablemente efectivos en comparación con las opciones actuales de los pacientes” y “puede usarse de manera segura en una etapa más temprana del tratamiento”, añadió Odejide, que no participó en este estudio.
En el ensayo clínico, la mitad de los pacientes recibieron Carvykti y la otra mitad un cóctel de medicamentos comúnmente recetados en la actualidad, incluida la quimioterapia y los esteroides.
“Después de una media de seguimiento de 16 meses, los investigadores encontraron que ciltacabtagén autoleucel redujo el riesgo de avance de la enfermedad en un 74% en comparación con los tratamientos estándar”, dijo un comunicado.
El mieloma múltiple es un cáncer de la sangre que afecta un tipo de glóbulos blancos llamados células plasmáticas o plasmocitos y puede causar daños graduales en los huesos, los riñones y el sistema inmunitario.
Afecta a siete de cada 100.000 personas cada año, según la Clínica Cleveland. El riesgo aumenta con la edad, y tiene mayor incidencia en hombres y personas negras.
Actualmente no existe una cura, aunque su avance puede retrasarse o detenerse durante mucho tiempo.
El nuevo tratamiento consiste en extraer las células T con receptor de antígeno quimérico (CAR) del paciente y modificarlas genéticamente en un laboratorio para que tengan proteínas específicas llamadas receptores que puedan buscar y destruir las células cancerosas.
Durante el ensayo clínico, el número de acontecimientos adversos graves o potencialmente mortales fue ligeramente superior en el grupo que recibió Carvykti que en el otro (97% frente a 94%). Además, tres cuartas partes de los participantes sufrieron una reacción inmunitaria excesiva y aproximadamente 5%, un síndrome de neurotoxicidad.
Los investigadores continuarán dando seguimiento a todos estos pacientes para determinar los efectos a largo plazo y el impacto en la calidad de vida de estos tratamientos. El ensayo clínico fue financiado por Janssen Research & Development y Legend Biotech USA.