Papa Francisco: “No me está gustando cómo el mundo sale de la pandemia”

Papa Francisco: “No me está gustando cómo el mundo sale de la pandemia”

Ciudad del Vaticano.- En su mas reciente entrevista para la Agencia Nacional de Noticias Télam, El Papa Francisco abordó los componente de la crisis mundial en lo económico, social y político, y expresó que no le esta gustando la forma en la que el mundo se recupera de la pandemia del Covid-19.

“No me está gustando. En algunos sectores se ha crecido, pero en general no me gusta porque se ha vuelto selectivo. Fíjate, el solo hecho de que África no tenga las vacunas o tenga las mínimas dosis quiere decir que la salvación de la enfermedad también fue dosificada por otros intereses. Que África esté tan necesitada de vacunas indica que algo no funcionó”

Expresó el Papa al ser cuestionado por la periodista Bernarda Llorente

En ese orden sostuvo que “Dar la vida por los demás es una de las cosas que apareció en esta crisis”, en referencia a todo el personal de salud que se entregó y perdió la vida contra el Covid-19.

“No podemos volver a la falsa seguridad de las estructuras políticas y económicas que teníamos antes. Así como digo que de la crisis no se sale igual, sino que se sale mejor o peor, también digo que de la crisis no se sale solo. O salimos todos o no sale ninguno”.

Manifestó Francisco.

En ese sentido agregó que la pretensión que un solo grupo salga de la crisis, por ahí te puede dar una salvación, pero es una salvación parcial, económica, política o de ciertos sectores de poder y usar la crisis para el propio provecho es salir mal de la crisis y, sobre todo, es salir solo.

“De la crisis no se sale solo, se sale arriesgando y tomando la mano del otro”, apuntó.

El papa se refirió además “al descompromiso político de los jóvenes”, y exhortó a los jóvenes del mundo involucrarse “porque son ellos los que tienen que plantear la salvación a las políticas universales”.

“Si los jóvenes no son protagonistas de la historia estamos fritos”

PAPA francisco

Añadió en ese sentido que se debe que reinstaurar el diálogo de los jóvenes con los viejos, ya que los jóvenes necesitan dialogar con sus raíces y los viejos necesitan darse cuenta que dejan herencia. 

Sobre las guerras actuales sostuvo que “Una guerra, lamentablemente, es una crueldad al día”, al tiempo de manifestar que el uso y la posesión de armas nucleares es inmoral.

“Creo que llegó el momento de repensar el concepto de “guerra justa”. Puede haber una guerra justa, hay derecho a defenderse, pero como se usa hoy día ese concepto hay que repensarlo. Yo he declarado que el uso y la posesión de armas nucleares es inmoral. Resolver las cosas con una guerra es decirle no a la capacidad de diálogo, de ser constructivos, que tienen los hombres”

indicó.

Los cuatro principios de Francisco

Desde sus años de formación jesuita, el Papa Francisco siempre defendió cuatro principios conceptuales que lo ayudaron a comprender no sólo las encrucijadas de su país, sino también algunos desafíos de su propia Iglesia.

“Reflexionar sobre ellos me ayuda mucho”, admitió el Pontífice en un tramo de la entrevista exclusiva que concedió a Télam, en el Vaticano.

“La realidad es superior a la idea”, es el primero de estos principios, es decir “cuanto te vas por los idealismos, perdiste, porque lo importante es la realidad, tocar la realidad”, según explicó el Pontífice. 

“El todo es superior a la parte”, es el segundo principio, lo que se traduce en la necesidad de “buscar siempre la unidad del todo”, como señaló Francisco.

“La unidad es superior al conflicto”, es el tercero, o sea, “cuando se privilegian los conflictos se está dañando la unidad”, según sus palabras.

“El tiempo es superior al espacio”, es el cuarto de los principios con el que Francisco explica, didáctico, cómo “los imperialismos siempre buscan ocupar espacios y la grandeza de los pueblos es iniciar procesos”.

A la hora de definirlos, a Francisco le gusta calificarlos como “cuatro principios que son filosóficos, políticos o sociales”, al tiempo que recuerda que siempre le ayudaron “a entender a un país, a una cultura o a la Iglesia”.

“Son principios humanos y de integración, – concluyó – mientras hay otros que son más ideológicos y de desintegración. Yo elijo estos”.