Por: Pavel De Camps Vargas
En contra de los principios de la libertad de expresión, al limitar el intercambio de información real, propician la creación de tendencias falsas como una forma de manipular percepciones.
El uso indiscriminado de bots se está convirtiendo en un problema real en el mundo moderno.
Estos programas automatizados a menudo se utilizan para crear tendencias falsas e influir en las decisiones relacionadas con encuestas o sondeos, con el objetivo de manipular los resultados y por ende la percepción de la audiencia.
Además, los bots se utilizan cada vez más para crear cuentas falsas e infiltrarse en tipos diferentes de conversaciones y como resultado, causan distorsión en la opinión pública o en los procesos de toma de decisiones.
Una de las consecuencias negativas por el mal uso de los bots es que dificulta las conversaciones auténticas y la capacidad de las personas para tomar decisiones basadas en opiniones verdaderamente informadas.
La utilización de estos programas informáticos automatizados está afectando a los medios de comunicación y al buen ejercicio profesional del periodismo. Esto va en contra de los principios de la libertad de expresión al limitar el intercambio de información entre comunidades con puntos de vista opuestos.
Las tendencias falsas creadas por programas automatizados también han causado confusión y desconfianza.
El mal uso de los bots se ha infiltrado en nuestro mundo en línea, allanando el camino para las malas prácticas y actividades deshonestas.
Los bots en República Dominicana los están usando de manera maliciosa por motivos nefastos, el último caso que podemos citar es el colapso de la plataforma de encuestas del reputado periódico Diario Libre, donde la cantidad de votaciones superó por mucho al número de ordenadores que accedieron a votar.
Por lo tanto, es importante que estemos atentos a su uso para que logremos identificarlos y así no interfieran en nuestra percepción.
