A pesar de su origen en la industria del tabaco, este producto no contiene tabaco, y ha demostrado ser una opción atractiva para el estilo de vida moderno de los adultos fumadores.
SANTO DOMINGO. – ¿Una bolsita de nicotina para colocarla en la boca? Se trata de una las más novedosas alternativas al cigarrillo que ha llamado la atención de adultos fumadores de Estados Unidos. En sus esfuerzos por adaptarse a las expectativas de los consumidores y brindar alternativas menos dañinas a los usuarios, en años recientes el sector del cigarro ha impulsado las ventas de un producto comúnmente llamado “Zyn”, el nombre de una de las marcas líderes.
Zyn, que ha tenido un auge importante en países como Estados Unidos, viene en presentaciones de distintos sabores como café, menta, canela y otros, por lo que en general, para el mercado resulta más atractivo que otros productos más tradicionales, además de ser menos dañino por la ausencia de humo. Aunque fue creado dentro de la industria del tabaco, se trata de un producto que no contiene tabaco y que, a diferencia de los productos clásicos, carece de exposición al humo del cigarrillo o el vapor del vape.
Para muchos usuarios, se trata de un producto sumamente conveniente, debido a que puede ser utilizado en cualquier espacio y en cualquier momento, ya que no produce humo ni olores. Además, su discreción y facilidad de uso lo hacen atractivo para aquellos que buscan una alternativa menos intrusiva que los productos predecesores.
De esta manera, Zyn representa un claro ejemplo de la capacidad de adaptabilidad de la industria del tabaco y ha demostrado ser una alternativa atractiva para aquellos que buscan opciones menos intrusivas y más compatibles con el estilo de vida actual, más ligero y práctico.
Por otro lado, es importante resaltar que la venta de este producto está prohibida a los menores de edad e igualmente cualquier publicidad de este dirigida específicamente a este segmento de la población. Es un producto exclusivamente para los adultos fumadores.
Cómo funciona
Los usuarios colocan los saquitos entre el labio y las encías, permitiendo que se liberen gradualmente niveles bajos de nicotina que se absorben. Dado que estos saquitos suelen carecer de tabaco, no se produce la necesidad de escupir, a diferencia de otros productos más tradicionales.