“El encuentro estuvo protagonizado por los alcaldes de ambas ciudades, Carolina Mejía y Alfredo Lucchesi”
Con una serie de actos protagonizados por sus máximas autoridades, fue celebrada la hermandad entre las ciudades de Santo Domingo de Guzmán y Santa Doménica Talao, cuna de muchas y reconocidas familias asentadas en República Dominicana.
El encuentro celebrado en el Monumento a Fray Montesinos y organizado por el Comité de Familias Dominico-Italianas Oriundas de Santa Doménica Talao, como símbolo del hermanamiento de ambas ciudades que conecta a tantas familias, tuvo como enfoque la fusión de las aguas del Mar Tirreno y el Mar Caribe, lo cual se llevó a cabo por medio de un acto simbólico.
Cabe destacar que esta unión se da debido a la gran cantidad de dominicanos oriundos de esta zona, buscando aunar esfuerzos para que se puedan acercar a sus orígenes.
Con el propósito de reforzar el arraigo y fomentar el intercambio, sobre todo cultural, entre ambas ciudades, los alcaldes Carolina Mejía y Alfredo Lucchesi, representantes de ambas comunidades, firmaron un acuerdo que así lo establece.
Previamente, Mons. Francisco Ozoria, arzobispo metropolitano de Santo Domingo, ofició una misa en la Catedral, durante la cual se hizo entrega a la basílica de una imagen de San Giuseppe, patrono de Santa Domenica, gesto que corresponde a la donación de una imagen de la Virgen de la Altagracia que hicieran Yolanda Logroño Di Vanna y su esposo, Juan Batlle, a aquella iglesia parroquial italiana.
En el acto, además de los alcaldes, participaron representantes del Consulado de Italia en Santo Domingo, miembros del Comité de Italianos en República Dominicana y de la Casa de Italia, así como de la comunidad oriunda de Santa Doménica Talao.
Cabe destacar que las alcaldías se comprometieron a promover la cooperación en áreas de interés común como la cultura, turismo medioambiente, entre otros; estimular procesos de intercambio de experiencia; aportar a la cultura y turismo de sus ciudades y promover el comercio y la inversión.
Antecedentes
La gran emigración italiana comenzó en los años de la formación del Reino de Italia (1861); casi diez millones de italianos salieron para EE. UU. entre los años 1860 y 1885. Según los datos reportados en el censo efectuado en el 1935, había ya casi 400 italianos presentes y muchos de ellos tenían apellidos originarios de Santa Domenica Talao (se piensa que desde los Estados Unidos vinieron a Santo Domingo por la afinidad entre los nombres de las respectivas ciudades).
Entre los apellidos reconocidos en la República Dominicana con origen en Santa Domenica Talao cabe destacar a las familias: Di Vanna, Schiffino, Campagna, Di Carlo, Sarubbi, Oliva (de la que recordamos que José Oliva Currari fue el fundador del Cuerpo de Bomberos de San Pedro de Macorís en 1928), Capobianco, Russo, Pezzotti, Aronne, Caputo, Bloise, Cucurullo, Pappaterra, Sangiovanni, Grisolia, De Paula, Perrone, Trifiglio, Riggio, Nardi, Scaldaferri, Sabatino, Grisolia, Lamboglia, Perrone, Pastrano, entre otros.
