El cáncer de próstata es el más frecuente en hombres y la segunda causa de muerte por esta enfermedad en la población masculina, por lo que un diagnóstico a tiempo es de suma importancia
Sin embargo, independientemente del estadio en que se encuentre al momento de la evaluación, se brinda un manejo personalizado del mismo, así lo explica, Wilton Cabrera, urólogo de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (CEDIMAT), quien señala que existen variedades de tratamientos cada vez más avanzados.
El especialista recomienda, en el caso de cáncer de próstata de bajo riesgo unilateral, la terapia focal, dirigida en tiempo real y con ayuda de la resonancia multiparamétrica previa y biopsia por fusión de imágenes. Esto permite la resolución de la enfermedad preservando la continencia urinaria y hasta la erección y la eyaculación, si es hemiablación focal.
En el caso de cáncer de próstata de riesgo intermedio y alto, la prostatectomía radical laparoscópica, que es una técnica de cirugía mini-invasiva, en la cual no se introducen las manos del cirujano ni se abre la piel del abdomen. “Esta aumenta la imagen más de diez veces y permite una mejor visión de las estructuras a preservar con un sangrado mínimo debido a la compresión
neumática del gas que se emplea, también puede realizarse la radioterapia externa sola o combinada con bloqueo hormonal.
El urólogo apunta que si la neoplasia fue diagnosticada en estado avanzado, el manejo es diferente. Por ejemplo, en el caso de que haya hecho metástasis, lo primero es que se debe bloquear la producción hormonal y conjuntamente aplicar terapia citoreductora, que puede ser radioterapia externa adyuvante.
“En este estadio regularmente se realiza una discusión con el comité de tumores compuestos por: urólogos, patólogos, oncólogos y radioterapeutas oncólogos, pero en cada estado el paciente debe estar informado de la terapia más conveniente y porque se elige una en lugar de otra, para el consentimiento del procedimiento conveniente.