Un estudio de la compañía privada estadounidense 23andMe, con sede en California, aporta evidencias sobre la importancia del tipo de sangre a la hora de contraer el coronavirus. Según informa la empresa en una publicación compartida este lunes, los datos preliminares de su investigación sugieren que el tipo de sangre O “parece ser protector frente al virus”.
La empresa californiana lanzó el estudio a primeros de abril con el fin de esclarecer si la genética podría explicar por qué algunos enfermos no experimentan síntomas, mientras que otros enferman gravemente. Como parte de la investigación, los participantes facilitaron información sobre si han experimentado síntomas de resfriado o de gripe y sobre si han sido diagnosticados o tratados por el coronavirus.
Los investigadores de 23andMe analizaron los datos obtenidos de 750.000 personas, 10.000 de las cuales habían sido hospitalizadas con covid-19. Según el resultado de su análisis, los pacientes con grupo sanguíneo O son tienen entre un 9 % y un 18 % menos probabilidades de dar positivo por covid-19 que los individuos con otros tipos de sangre. Esto se aplica tanto al Rh positivo como al negativo.
Personas ‘expuestas’
Los científicos descubrieron, asimismo, que entre las personas que se ven más expuestas al virus, como los trabajadores de centros médicos, el tipo de sangre O se revela igualmente protector frente al covid-19. No obstante, en este caso la proporción es un poco mayor: de un 3,2 % frente al 4,1 % para el tipo AB. Asimismo, entre los encuestados ‘expuestos’, aquellos con grupo sanguíneo O tenían entre un 13 % y un 26 % menos proclives a dar positivo que los demás.
No obstante, los expertos señalan que “debido a que las diferencias [entre los cuatro tipos de sangre] son bastante pequeñas, se necesita un tamaño de muestra extremadamente grande para explorar las diferencias entre los grupos”.
“El estudio y el reclutamiento están en curso, con la esperanza de que podamos usar nuestra plataforma de investigación para comprender mejor las diferencias en la forma en que las personas responden al virus”, concluyen los investigadores. Fuente: RT