La coordinadora ejecutiva de la reforma policial, Mu-Kien Adriana Sang, denunció este martes las precarias condiciones en las que se encontraba la Escuela de Entrenamiento Policial en Hatillo al inicio del proceso de reforma de la Policía Nacional, destacando que desde entonces se han logrado mejoras significativas.
“Lo que encontramos cuando comenzamos a visitar las instalaciones eran espacios en condiciones deplorables, algo que daba pena y ganas de llorar. En la primera escuela de entrenamiento de Hatillo, las condiciones en las que se formaban los policías eran lamentables. El área destinada a las mujeres estaba tan hacinada que una persona con sobrepeso no podía pasar entre las camas, que estaban prácticamente pegadas. Las cobijas eran simples frazadas y los baños ni siquiera tenían puertas”, relató Sang durante su intervención en el programa matutino El Día.
Por su parte, el general retirado de Colombia y miembro de la comisión de reforma, Luis García, señaló que la inversión en las mejoras ha sido considerable, aunque aún queda trabajo por hacer.
“La inversión ha sido muy alta en movilidad y equipamiento para los policías, pero todavía falta mucho por remodelar y modernizar en las unidades policiales y escuelas de formación. Sin embargo, hay avances concretos y planes de trabajo bien estructurados”, afirmó García.
También reconoció que es normal encontrar resistencia a los cambios debido a factores culturales, pero enfatizó la importancia de analizar y reducir la incertidumbre, generando confianza tanto en la población como en el personal de las instituciones involucradas.
Los coordinadores de la Comisión de Reforma Policial aseguraron que, gracias a las mejoras salariales y en las condiciones implementadas dentro de la institución, cada vez más jóvenes muestran interés en unirse a las filas de la Policía Nacional.