El dirigente político, Ramfis Domínguez Trujillo manifestó que, es imposible fijar una fecha precisa para las elecciones, debido a la elevada propagación del coronavirus que ya supera los dos mil contagiados y más de cien muertes.
En este sentido, advirtió que, aunque esta semana se vence el plazo establecido por la Junta Central Electoral (JCE) para recibir de los partidos políticos sus recomendaciones para la fecha en que deberán celebrarse las próximas elecciones presidenciales y congresuales, no se puede tomar una decisión de esta envergadura sin favorecer los intereses colectivos, entendiendo que la salud de los dominicanos debe primar en estos momentos de tanta fragilidad humana.
“Para poder tomar una decisión de esta envergadura, debemos analizar bien nuestra realidad y aceptar las grandes limitaciones ante un contagio que ha doblegado hasta a las más grandes potencias del mundo”, indicó en un vídeo colgado a través de sus redes sociales.
“Lamentablemente aún no hemos tocado fondo ante esta crisis nacional, y tenemos que abogar siempre por el bienestar colectivo, no por los intereses particulares”, precisó.
“Entiendo que ante nuestra realidad, es imposible fijar una fecha precisa de cuando habremos superado este proceso, y cuando las cosas volverán a su normalidad. Es por eso que nuestra propuesta es sencilla y lógica: debemos invertir todos nuestros esfuerzos en juntos erradicar la propagación de esta pandemia”, enfatizó.
En este punto recomendó pautar la fecha de las elecciones cuando se haya logrado eliminar el riesgo de contagio para no seguir malgastando recursos que se pudieran implementar en aumentar la cobertura médica y fortalecer nuestra posición ante esta pandemia.
“No podemos seguir desperdiciando recursos en unas posibles elecciones para luego tener que cambiar la fecha”, añadió.
Asimismo, resaltó que se debe priorizar la participación de los dominicanos residentes en la diáspora, para lo cual se debe escuchar la posición del gobierno norteamericano respecto de la posibilidad de celebrar los comicios en las demarcaciones estadounidenses donde viven los dominicanos.
Según explicó, de no hacerse de esta manera, “estaríamos privando de un derecho constitucional a cerca de 600,000 ciudadanos, registrados para votar en el padrón de la JCE, envestidos por la legitima facultad de elegir al candidato de su predilección”.
“Los dominicanos de la diáspora merecen respeto, merecen ser escuchados y tomados en cuenta. No podemos seguir beneficiándonos de sus aportes, a la vez que desconocemos sus auténticos derechos ante decisiones que afectan a todos los dominicanos”, subrayó.
Finalmente, exhortó a trabajar unánimemente como dominicanos, para vencer esta peligrosa pandemia y buscar una solución al aplazamiento de las elecciones de mayo.
“Busquemos soluciones, hagamos propuestas y vamos a trabajar, pero sin banderías políticas, sino como dominicanos, todos juntos, pues en nuestra unidad está nuestra fuerza”, expresó.