Por: Jatzel Román
El presidente Petro de Colombia le propone públicamente a Nicolás Maduro que como salida a la crisis implemente algo similar al Frente Nacional que rigió a los colombianos durante 16 años entre 1958 a 1974.
Aquel histórico acuerdo posterior al régimen de Gustavo Rojas Pinilla consistía en que los partidos Liberal y Conservador compartirían durante cuatro periodos el 50% de todos los cargos ejecutivos, el 50% de todas las posiciones municipales y el 50% de todas las posiciones legislativas. Cada cuatro años, la presidencia se rotaría entre un miembro de cada partido que debería ir a elecciones con apoyo de ambos.
Esto tuvo el magnifico resultado de que acabó para siempre con la violencia política entre liberales y conservadores que llevaban más de un siglo matándose ferozmente en Colombia. Un efecto negativo analizado fue que convirtió al país en uno de los más clientelistas de la región puesto que la mayoría de los actores se acostumbraron a que siempre les dieran alguito tras cada elección y aunque el acuerdo se acabó formalmente en el 74, todavía al día de hoy los presidentes colombianos nombran gente de todos lados. Le llaman “mermelada para la tostada”.
Lo irónico es que ese acuerdo era aborrecido por la ultra izquierda colombiana que al no ser contemplada en el reparto, justificaron su insurrección violenta, entre ellos la guerrilla M-19 que integró Petro en oposición a la victoria del Frente en 1970. Es decir, la figura más demonizada por la izquierda colombiana hoy es planteada como solución para Venezuela.
En República Dominicana no se ha implementado tan así, pero en 1974 tras que el Acuerdo de Santiago se retirara de las elecciones, el presidente Balaguer les ofreció a todos puestos en el gobierno, aceptado por unos integrantes pero también rechazado por otros. Lo que si que les tocaron sus puestos a varios opositores, con posiciones como la Embajada en la ONU, la asesoría económica y Turismo.
En 1994, durante la gran crisis post electoral, el presidente Balaguer de nuevo ofreció compartir “el pastel” a la oposición mayoritaria como salida. Esto consistiría en 50-50% de los puestos gubernamentales y tras dos años, la rotación de la presidencia. El Dr. Peña Gómez lo vio aceptable pero dijo que tenía que consultar con su partido, que pidieron someterlo a votación y según los presentes, el rechazo a la oferta se impuso por diferencia de un voto. La salida entonces fue hacer nuevas elecciones.
https://x.com/petrogustavo/status/1824108739856568320?s=46
