Por Manuel Quiterio Cedeño
¿Qué tan importante es el turismo para la actividad agropecuaria? Preguntó Alfredo Freites en su programa diario en la emisora La Nota Diferente. Un tema siempre interesante para mí, porque crecí en una región principalmente dedicada al cultivo de caña de azúcar y la crianza de ganado vacuno.
Los potreros sembrados de yerba “pangola” y “guinea” y los campos de caña del Central Romana, al final de los años sesenta, llegaban casi a los límites de mi pequeño Higüey de final de los años sesenta con sus 21 mil habitantes. ¿Turismo, cuál? Existía el Hotel Naranjo como una herencia del pasado, como en muchas de las capitales de provincia de entonces y lo demás era ir los domingo y feriados a Playa Macao, los más osados hasta El Cortecito, en el corazón de lo que hoy es un emporio productivo de riquezas que se llama Punta Cana.
Con la década de los 70 el país se puso en “modo” turismo y arrancó. Nació la ley de incentivos, pero a Higüey sólo llegó, empujado por Frank Rainieri, como un ave extraña natural de otro nidos. Para bien de la región, fue una semilla de buena clase, bien plantada, abonada con ayuda de españoles experimentados, cuyos corazones y carteras quedaron pegadas en la tierra de La Altagracia. En tres décadas la historia cambio para Higüey y para todo el país.
Medio siglo después, mi tierra es diferente. Un cambio de 180 grados. Sigue la caña y el ganado, lo único nuevo que se sembró y pare cada vez mejores frutos, es el turismo. Docenas de estudios, informes, las estadísticas locales y los reportes de entes internacionales, confirman cada año que si funciona.
En el 2020 la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estimó que el consumo agropecuario en hoteles dominicanos sumó RD$3.5 mil millones. El último informe de “Despradel y Asociados” para Banreservas y ASONAHORES retrata los encadenamientos económicos del turismo con el resto de la economía, tomando como caso de estudio el año 2022. También responde la pregunta de Alfredo Freites. Ese año la demanda del sector turismo a la actividad agrícola sumo RD$6.7 mil millones.
La lista incluye productos de cultivos de cereales, cultivos tradicionales, ganadería silvicultura, pesca, etc. Hablamos de tipos de carne, pescados, mariscos, embutidos, huevos, lácteos, frutas, vegetales, víveres, verduras y otros.
El encadenamiento con la economía aporta los siguientes datos sobre las compras del turismo a otros sectores: servicios RD$104 mil millones; industria RD$28 mil millones, y con los $6.7 mil millones de la agropecuaria sumarian RD$139 mil millones. La cifra de servicios incluye RD$41 mil millones al comercio, RD$16 mil millones en electricidad, gas y agua. Las compras al sector industrial incluyen RD$13 mil millones en construcción y RD$15 mil millones en manufacturas.
Un dato interesante es que en el 2022 los hoteles tenían 106,891 empleados que recibieron RD$37 mil millones en salarios. Además generó, 11,392 empleos en industria; 8,364 en agricultura; 4,976 en la construcción; 6,412 en manufactura y 94,086 en servicios, que recibieron RD$37 mil millones en salarios.
