El mundo está viviendo una época de transición en la que surgen nuevos actores en el escenario global, y con el impulso del multilateralismo seguirán formándose alianzas entre países que fortalecerán sus intereses para desarrollar proyectos de interés nacional.
Este planteamiento fue formulado y sustentado por el reputado académico y geopolitólogo Iván Ernesto Gatón, quien recientemente impartió una conferencia en la Universidad de Chihuahua, en México. Allí le entregaron un reconocimiento por su labor académica.
En su exposición, el experto dominicano habló del bloque formado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica (Brics), y dijo que estos países se han aliado con objetivos comunes, como lo son “promover una estricta observación del derecho internacional, rechazar las políticas que limiten la soberanía de los estados, buscar un sistema mundial más equilibrado y justo en las relaciones económicas mundiales, y lograr una reforma del sistema financiero porque consideran que solo sirven para apuntalar al sistema financiero de los Estados Unidos y los países occidentales”.
Aseguró que la transformación de la economía mundial y la profunda crisis económica de Occidente han permitido a los Brics “no solo mantener un crecimiento sostenido de su economía, sino también tener más incidencia en el ámbito político global”.
Apuntó que, en el 2019, los Brics dieron a conocer la creación del Nuevo Banco de Desarrollo para beneficiar iniciativas de sus miembros, con un capital inicial de 50 millones de dólares estadounidenses.
El gigante de Asia
Gatón indicó que el fin de la Segunda Guerra Mundial dio paso a un mundo bipolar que se desmoronó con la caída del muro de Berlín, “lo que permitió a los Estados Unidos de América hiperhegemonizar a nivel global”.
Añadió que “a partir de la crisis financiera de 2008, provocada por Lehman Brothers y que afectó seriamente a las economías de Estados Unidos y Europa, vemos un actor que, sin prisa pero sin pausa, fue aglutinando a su alrededor a países emergentes, a los fines de lograr un orden global más acorde a los intereses de estos”.
Identificó a China como el país que atrajo a su alrededor a países emergentes.
“Es curioso notar cómo la República Popular China ha aprovechado el nuevo giro que han tenido las relaciones internacionales, en ese cambio inusitado que no se veía desde los albores de la civilización humana, muy especialmente a partir de la revolución industrial en el siglo XIX, cuando se impuso el sistema internacional centrado en Occidente, y que es el multilateralismo, o policentrismo, en las relaciones internacionales, que en estas primeras décadas del siglo XXI marca las pautas a seguir por los Estados nacionales”, dijo el expositor.
Anotó que a pesar de la invasión a Ucrania, Rusia no ha sido sancionada por los demás miembros del Brics, lo cual se debe a que “India tiene un vínculo comercial histórico con Rusia y Brasil necesita de los fertilizantes rusos para su producción agrícola”.
Subrayó que, en esas circunstancias, “se muestra que la ambigüedad estratégica es un imperativo en el momento en que se puede sacar mayor provecho para países que no estarán subordinados al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional cuando enfrenten crisis económicas y que han encontrado el espacio para materializar sus ambiciones de desarrollo nacional, manteniendo distancia de las grandes disputas geopolíticas. Es evidente que el motor principal de este grupo es China, que ha encontrado un espacio para ampliar su incidencia política global”.
Rusia y China son miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, mientras que Brasil, India y Sudáfrica tienen un peso internacional importante. Conociendo la fuerza de su ambición, Occidente está tratando de contrarrestar a los Brics.
El renacer del Renacimiento
El experto dominicano comparó esta época con el esplendor del Renacimiento en Europa, donde se asumieron nuevos valores y se abandonó la visión teocéntrica del mundo. Fue así como surgieron los principios de solidaridad y fraternidad de los seres humanos, que tuvo su grito supremo en la Revolución Francesa de 1789.
Su criterio es que “la civilización humana, en este nuevo orden, debe eximirse de antiguos paradigmas de paz y progreso, como los de la Pax Romana, que ocultaban su verdadero fin de opresión y maximización de beneficios a costa de grupos más débiles, militarmente hablando. Es una constante en la historia que los grupos más poderosos arguyan una superioridad racial, civilizatoria, para imponer sus sagrados esquemas, así fuesen métodos prohijados en la más abyecta y absurda barbarie”.
Otro mundo está naciendo
“El mundo multipolar es una realidad sin precedentes, desde los albores de la conformación de las grandes civilizaciones humanas, entrañando en su esencia nuevas relaciones de fuerzas, modificando el conjunto de geopolíticas y las sempiternas problemáticas internacionales. Este nuevo escenario internacional nos presenta la incontrovertible necesidad de valorar en la más absoluta dimensión de igualdad, soberanía e independencia los vínculos de todos los países que componen la sociedad internacional contemporánea, dejando como parte de un aciago recuerdo los tiempos de avasallante colonialismo y hegemonía, viendo estos vínculos como una relación entre iguales que tienen la imperiosa necesidad de aplicar relaciones de mutuo beneficio”, continuó.
Proyecciones económicas
Gatón observó las proyecciones que hace el Fondo Monetario Internacional para la contribución del crecimiento a la economía mundial en los próximos cinco años, a saber: China, 22.6%; India, 12.0%; Estados Unidos, 11.3%; Alemania, 2.1%; Turquía, 2.1; Japón, 1.7; Brasil, 1.7%; Egipto, 1.7%; Rusia, 1.6%; Bangladesh, 1.6%; Vietnam, 1.6%; Reino Unido, 1.5% y Francia, 1.5%.
“Como podemos observar en las proyecciones del FMI, antiguas colonias como China, India, Vietnam, Egipto y Bangladesh, estarán aportando más en el crecimiento económico mundial que antiguas metrópolis como Reino Unido y Francia”.
“Si bien es cierto que los imperios por definición son expansionistas, y que los países tienen intereses, no amigos, China ha aprovechado su fortaleza financiera, económica y comercial para hacer un entramado que le permita continuar su proyecto de potencia, evitando obstáculos y haciéndose de aliados que, como Rusia, India, Brasil y Sudáfrica le sirven de apoyo en sus objetivos”, añadió el analista.
“Este nuevo marco conlleva un cambio radical en la mentalidad de los actores políticos, no quedándose anclados en antiguos órdenes de influencia de poder internacional, de corte meramente occidental, soslayando el multilateralismo, quienes deben asumir un rol de actores visionarios, comprendiendo y asumiendo los procesos históricos que marcan nuevas rutas”, finalizó.
Por Iván Gatón