Deyanira Sosa enfrenta esta Navidad con un pesar profundo, tras la dolorosa pérdida de su hija Melissa Tejeda, una joven doctora que falleció en la tragedia del Jet Set. Para esta madre, que atraviesa su primer diciembre sin la presencia física de su hija, el camino del duelo ha sido “un proceso de aprendizaje en medio del sufrimiento, donde la fe y el amor han sido pilares fundamentales para encontrar consuelo y esperanza”.
Enfrentando una época que tradicionalmente se vive en familia, Deyanira detalla que descubrió que el verdadero amor nunca desaparece, sino que simplemente cambia su forma. “He aprendido a aceptar el dolor sin miedo, a transformar la ausencia en una forma activa de amor y a renacer en gratitud y fe”, escribió en su cuenta de Instagram.
“El duelo no se supera, se transforma en propósito”, afirma, y recuerda que Dios sana en silencio y renueva el alma con amor, dejando una luz viva incluso en los momentos de oscuridad.









