Continúan saliendo a la luz nuevos detalles sobre la tragedia ocurrida en el Jet Set Club, luego de que se conociera que Gregorio Adames Arias, empleado del establecimiento, fue contactado días después del incidente por Maribel Espaillat, integrante de la administración del local y señalada como imputada en el caso.
Según consta en el expediente, el 14 de abril de 2025, Maribel Espaillat se comunicó con Adames para solicitarle un encuentro personal, el cual se concretó esa misma tarde en la residencia del empleado. En esa reunión, la señora Espaillat lo cuestionó sobre a quién había informado acerca de las irregularidades que había notado en el Jet Set Club antes de la tragedia.
Gregorio Adames aseguró que no le había contado a nadie, momento en el que, de acuerdo con su testimonio, Maribel Espaillat le advirtió que esa situación podría acarrearle “20 años de cárcel a Antonio Espaillat”, propietario del afamado establecimiento nocturno.
Durante el encuentro, el empleado también manifestó que el desplome del techo pudo haberse evitado, a lo que la imputada respondió que pensaba que él se refería únicamente a los plafones, no al techo completo. Esta declaración, según las autoridades, evidencia la falta de atención y negligencia por parte de la administración del Jet Set al no verificar debidamente el origen de los desperfectos denunciados.