Tras su regreso al país luego de asistir al funeral del Papa Francisco, la primera dama Raquel Arbaje envió un emotivo mensaje al pueblo dominicano, en el que llamó a la reflexión sobre los verdaderos valores de la vida y advirtió sobre la ilusión del poder y la fama.
“Cuánto quisiera decirle a nuestro pueblo… No nos dejemos impresionar por todo lo que se ve de fuera. Todos somos iguales, todos somos humanos, y ese es el legado del Papa Francisco: su sencillez, su humor, su cercanía, fiel reflejo del amor de Jesús”, expresó Arbaje.
La primera dama compartió que, aunque en estos años de servicio público ha tenido oportunidad de conocer a figuras como el expresidente Donald Trump y otros líderes mundiales, recordó que “todo eso es pasajero”. Relató que uno de los momentos más conmovedores fue cuando el féretro del Papa desapareció de su vista, lo que describió como “un instante íntimo de reflexión personal”.
En su mensaje, Arbaje exhortó a cada dominicano a “construir su propia hoja de vida, con la mejor sonrisa aún en medio de la tormenta”, subrayando que el éxito no depende de la fama ni de las riquezas materiales. “El dinero es una vía para tener cierta seguridad, pero ¿qué tanto es realmente necesario? El éxito es tan personal, y no hay que ser famoso para lograrlo”, afirmó.
También reconoció que este ha sido “un mes de mucho dolor”, pero insistió en que seguirán adelante “en fe y justicia”, alentando a no perder la esperanza ni la autenticidad. “Todos somos valiosos por ser únicos”, reiteró.
