“No puedo ir a ningún sitio. Tengo muchas ganas de estar en casa. Abrazar a mi familia y amigos. Pero entiendo que hay una investigación y he cooperado, pero no me han dejado ir”, dijo el joven estadounidense Joshua Riibe en sus declaraciones durante la audiencia de habeas corpus preventivo por el caso Sudiksha Konanki.
Riibe ha denunciado estar retenido en el país, específicamente en su habitación del hotel RIU, donde ocurrió la desaparición de la joven india Sudiksha Konanki y hecho por el que es investigado.
Mientras se desarrolla la investigación, Joshua Riibe ha declarado que su movimiento está estrictamente vigilado y que no ha podido regresar a su país, pese a haber cooperado con las autoridades.
En su testimonio, Riibe relató que el domingo salió a desayunar y, al regresar a su habitación, la policía llegó molesta porque no había notificado su salida. “Incluso cuando voy a comer, la policía viene y se sienta en la mesa conmigo”, explicó. Además, mencionó que intentó salir del resort para acudir a una reunión en la embajada, pero su partida generó una fuerte reacción de las autoridades, lo que resultó en que tuviera que esperar en el vestíbulo hasta ser escoltado por la policía turística.
Según Riibe, los padres de la víctima le agradecieron personalmente por haber ayudado a su hija en el momento que se presume se ahogaba. Sin embargo, tras su muerte, la investigación ha mantenido a varios testigos bajo estricta supervisión.
Hasta el momento, las autoridades dominicanas no han dado un plazo exacto para la conclusión de la investigación ni han aclarado si Riibe podrá abandonar el país pronto. Mientras tanto, el caso de Sudiksha Konanki sigue generando preguntas y un intenso escrutinio internacional.
