Embajador Víctor Suárez expresa su solidaridad con el Papa Francisco y presenta una ofrenda especial de la República Dominicana

Embajador Víctor Suárez expresa su solidaridad con el Papa Francisco y presenta una ofrenda especial de la República Dominicana

Roma, Italia. En un emotivo mensaje dirigido a los medios de comunicación, el Embajador de la República Dominicana ante la Santa Sede, Víctor Suárez, se unió a las plegarias del pueblo dominicano por la pronta recuperación del Santo Padre Francisco. En su declaración, destacó el profundo respeto y admiración que la nación caribeña siente por el Pontífice y anunció la entrega de un obsequio de gran valor simbólico: una escultura tallada en ámbar azul que representa al Cristo Vivo del Jardín Botánico de Santiago.

“El pueblo dominicano se une en oración por la salud del Santo Padre. Es nuestro deseo que pronto recupere sus fuerzas y continúe su invaluable labor de guía espiritual para el mundo. Con esta obra, llevamos hasta él un símbolo de nuestra fe, un testimonio de nuestra historia y un mensaje de misericordia”, expresó Suárez en su mensaje.

Un regalo de fe y naturaleza: el Cristo Vivo en ámbar azul

La pieza, tallada por artesanos dominicanos en ámbar azul, es una representación de El Cristo de la Misericordia, una escultura monumental ubicada en la cima del Jardín Botánico de Santiago de los Caballeros. La imagen, inspirada en una iconografía cristiana traída desde Colombia, muestra a Jesús en la cruz con una mano aún libre, extendida en un gesto de ayuda y compasión.

El ámbar azul, una de las piedras semipreciosas más raras y valiosas del mundo, se extrae de las montañas cercanas a Santiago. Su coloración especial y su formación milenaria lo convierten en un emblema de la historia natural y la identidad dominicana.

“El Cristo de la Misericordia no solo es un símbolo de fe, sino también de humanidad y entrega. A través de esta pieza, llevamos al Santo Padre un fragmento de nuestra tierra, un mensaje de esperanza y el reflejo del espíritu solidario del pueblo dominicano”, destacó el Embajador.

Desde su inauguración en 2018, el Cristo Vivo se ha convertido en un punto de referencia espiritual y cultural en la ciudad de Santiago, acogiendo actividades religiosas, meditaciones y hasta eventos astronómicos. Su conexión con la naturaleza se ha hecho aún más evidente con la inesperada presencia del pájaro carpintero de La Española, que ha encontrado refugio en la estructura, integrando la obra humana con el ecosistema del jardín botánico.

Un gesto de cercanía y admiración hacia el Papa Francisco

Con este regalo, la República Dominicana reafirma su cercanía con la Santa Sede y su profundo respeto por la figura del Papa Francisco. El Embajador Suárez manifestó su esperanza de entregar personalmente la pieza al Santo Padre en el momento en que presente sus cartas credenciales.

“El ámbar azul no solo brilla por su belleza, sino también por la luz que emana de su historia y significado. Así como el Cristo Vivo extiende su mano para ayudar, nuestra nación extiende este obsequio como símbolo de nuestra fe y nuestro respeto por Su Santidad”, concluyó Suárez.

Este acto reafirma la relación entre la República Dominicana y el Vaticano, resaltando el valor del arte, la fe y la identidad nacional como puentes de unión y hermandad entre los pueblos.