La embajadora de la República Dominicana en Francia, Rosa Hernández de Grullón, finalizó su labor diplomática con una ceremonia en la iglesia Saint Philippe de Roule, donde se celebró una misa en honor a Nuestra Señora de la Altagracia.
Durante el evento, Hernández de Grullón se despidió de la comunidad dominicana en Francia, agradeciendo el apoyo recibido durante su gestión.
Como parte de su legado, la embajadora inauguró una imagen de la Virgen de la Altagracia en una capilla de la iglesia, proporcionando un espacio para que los dominicanos en Francia mantengan vivas sus tradiciones religiosas.
Además, la plataforma @notamusical.fr reconoció a Hernández de Grullón por su continuo apoyo a proyectos comunitarios y culturales, destacando su compromiso con la diáspora dominicana en Francia.
La comunidad dominicana en Francia expresó su gratitud hacia la embajadora por su dedicación y esfuerzo en fortalecer los lazos entre ambos países durante su mandato.