El gobierno del presidente Luis Abinader ha enfrentado una serie de renuncias y salidas de funcionarios clave, lo que ha generado un intenso debate en el ámbito político y social de la República Dominicana.
El año 2024 ha sido un período de transformaciones y desafíos para el gobierno del presidente Luis Abinader. En el transcurso del año, varios funcionarios de alto nivel decidieron abandonar sus cargos, generando debates sobre las implicaciones de estas salidas y los posibles motivos detrás de las mismas.
Renuncias destacadas
Entre los que dimitieron figura el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Pavel Isa Contreras, quien estuvo al frente de la institución durante más de dos años. Isa presentó su renuncia a través de una carta, revelada el 12 de diciembre, aunque fue redactada el 4 del mismo mes, en la que deja claro el motivo de su decisión: la fusión de su ministerio con el Ministerio de Hacienda.
A la lista se suma Jeffrey Lizardo Ortiz, quien renunció a su cargo como viceministro de Planificación del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD), con efecto a partir del 31 de diciembre de este año, “por motivos personales”. Este cargo le fue conferido por Luis Abinader mediante el Decreto No. 456-24, artículo 11, de fecha 21 de agosto de 2024.
La viceministra Administrativa de la Presidencia, Dilia Leticia Jorge Mera, presentó su dimisión al Jefe de Estado. La abogada explicó que volverá a “retomar la práctica profesional en el sector privado, enfocándome en el ejercicio del derecho de familia, así como en la defensa de los derechos de la niñez y de las mujeres, áreas a las que deseo dedicar los próximos años de mi vida productiva”.
Otro que renunció de su cargo como director ejecutivo de la Dirección General de Alianzas Público-Privadas fue Carlos Pimentel. Su renuncia se produjo luego de que varios sectores alegaran violación a la ley, puesto que también dirigía la Dirección General de Contrataciones Públicas (DGCP).
El 14 de agosto de 2024, Milagros De Camps, viceministra de Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, anunció su renuncia. En su comunicado, De Camps destacó los logros alcanzados durante su gestión y resaltó los desafíos enfrentados, reafirmando su compromiso con la causa del cambio climático.
También Rafael Velazco Espaillat, anunció su renuncia como superintendente de electricidad en julio de 2022 en medio de los señalamientos a esta entidad y a otras del sector eléctrico.
Además, Ana Cecilia Morun Solano, renunció como presidencia ejecutiva del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani).
Igualmente, a finales de 2020, la directora ejecutiva del Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (ProConsumidor), Anina Del Castillo, informó su renuncia citando “razones personales”.
El exviceministro de Salud Pública, Robinson Díaz, renunció a su cargo alegando razones personales, en circunstancias similares a las de Plutarco Arias, quien también dejó su puesto por motivos similares. Ambos casos resaltan la salida de funcionarios clave en un sector tan sensible como el de la salud.
A pesar de los esfuerzos por mantener la estabilidad en el gabinete, las renuncias han generado preguntas sobre el impacto en la continuidad de los programas y proyectos impulsados por el gobierno. En sectores como economía, infraestructura y programas sociales, la salida de líderes clave ha requerido ajustes inmediatos para evitar interrupciones en la gestión.
Otras renuncias que fueron notables en áreas estratégicas
Entre las figuras más destacadas que han dejado sus cargos se encuentra Roberto Fulcar, exministro de Educación, quien fue sustituido en medio de críticas sobre la ejecución de programas educativos y la implementación de estrategias de aprendizaje durante la pandemia. Aunque Fulcar alegó razones de salud para su salida, su partida dejó un vacío en una de las carteras más importantes del gobierno, lo que obligó al Ejecutivo a realizar ajustes significativos.
Otro caso relevante fue el de Kimberly Taveras, quien se desempeñaba como ministra de la Juventud y renunció tras una controversia relacionada con su declaración jurada de patrimonio. Este hecho generó un amplio debate público sobre la transparencia en la administración pública y llevó a Abinader a reiterar su compromiso con la lucha contra la corrupción.
Asimismo, se destaca la renuncia de Lisandro Macarrulla como ministro de la Presidencia, quien dejó su cargo alegando motivos personales. Macarrulla, una figura clave en el diseño y ejecución de políticas del gobierno, enfrentó cuestionamientos por supuestos vínculos familiares con casos judiciales en el ámbito empresarial. Su salida marcó un giro significativo en el equipo cercano al presidente.
Impacto en la gestión gubernamental
Las renuncias de estos y otros funcionarios han puesto a prueba la capacidad del gobierno para mantener la continuidad y eficiencia en la gestión pública. Luis Abinader, en respuesta, ha optado por realizar nombramientos estratégicos que buscan garantizar la estabilidad institucional y reforzar áreas críticas. Sin embargo, las salidas han generado críticas de sectores opositores, quienes han cuestionado la cohesión interna del equipo gubernamental y han utilizado estos eventos como argumento en la contienda electoral.
Por su parte, el presidente Abinader ha defendido las decisiones tomadas en torno a las renuncias, destacando que su administración respeta la autonomía de los funcionarios para dejar sus cargos y subrayando que las salidas no afectan el compromiso del gobierno con la transparencia y la eficiencia.
Reacciones del panorama político
El Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha cerrado filas en torno al presidente, destacando que las renuncias son parte de la dinámica natural de cualquier gobierno y que los cambios representan oportunidades para fortalecer la gestión pública. Sin embargo, la oposición, encabezada por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y la Fuerza del Pueblo, ha utilizado estas salidas como una señal de supuesta desorganización y desgaste del gobierno.
Leonel Fernández, líder de la Fuerza del Pueblo, ha señalado que las renuncias evidencian problemas estructurales en la administración de Abinader, mientras que Abel Martínez, candidato presidencial del PLD, ha criticado lo que considera una falta de liderazgo en la gestión de crisis internas.
Mirando hacia el futuro
Con las elecciones en el horizonte, el gobierno de Luis Abinader enfrenta el reto de consolidar su gestión y mantener la confianza de la ciudadanía. Los cambios en el gabinete, aunque desafiantes, también representan una oportunidad para incorporar nuevas perspectivas y fortalecer el equipo de trabajo en áreas clave.
El tiempo dirá si estos ajustes logran consolidar los logros del gobierno o si, por el contrario, generan nuevos desafíos en un año crucial para el futuro político del país. Mientras tanto, el presidente Abinader y su equipo deberán redoblar esfuerzos para mantener la estabilidad y responder a las expectativas de la población.
